SALTA (Redacción) – Este miércoles se dio inició a la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (Eurolat) en el Centro Cultural Kirchner. Este acto fue encabezado por la actual presidenta del Senado, Cristina Kirchner, y revestía un caracter meramente protocolar. Sin embargo, fiel a su historia, el kirchnerismo decidió convertirlo en un acto militante. Convocó a más de 1.000 seguidores del Frente de Todos y el discurso de la expresidente se extendió mucho más de la cuenta.
Esto provocó malestar dentro del grupo de parlamentarios europeos. Es que los parlamentarios del Viejo Continente condenaron los fines partidistas que tuvo el acto encabezado por Cristina Kirchner. Su malestar fue dado a conocer a través de un comunicado donde cuestionaron a la expresidente y a la conducción de EuroLat que había llenado de elogios a la expresidenta.
El duro comunicado de los parlamentarios
El comunicado fue dirigido a Javi López, copresidente del componente europeo de EuroLat, y firmada por Leopoldo López Gil (coordinador), José Manuel García Margallo (vicepresidente de EuroLat) y otros siete parlamentarios del Grupo del Partido Popular Europeo. “Queremos trasladarle nuestro profundo malestar. Tras el bochornoso espectáculo que se ha producido durante la sesión inaugural de la sesión plenaria de la Asamblea”, señalaron en el escrito.
«Desde el grupo del PPE se sostiene que un acto solemne e institucional no puede ser instrumentalizado ni utilizado con la finalidad partidista por la que ha transcurrido el acto celebrado hoy. Más propio de un mitin político que el de un parlamento democrático legislativo”, señalaron en el fragmento más duro de su escrito.
Por último, le solicitaron a López que haga llegar su malestar al Senado argentino, encargado del evento y conducido por Cristina Kirchner. «Solicitamos que hagas llegar nuestra más profunda protesta por la situación acaecida. Dista mucho de lo que ha de ser un acto protocolario. Supone de falta de adecuación a la cortesía parlamentaria y al respeto institucional a la dignidad de la función parlamentaria», sentenciaron los parlamentarios europeos.
