SALTA (Redacción) – La guerra que se está llevando a cabo en Europa del Este tiene al mundo conmocionado. La mayoría de las instituciones multilaterales apuntan sobre la cabeza de Vladimir Putin y también lo hacen la mayoría de las naciones de Occidente. Se han aplicado duras sanciones contra Rusia pero su presidente aprovecha las inmensas reserva de gas como palanca de amenazas.
En un entrevista que dio a un medio europeo, el presidente ruso advirtió que Occidente no tiene alternativa alguna al gas de su país. En este contexto, Putin amenazó a los países europeos con cortar el suministro energético que aporta su país. «Simplemente no existe un reemplazo razonable para Europa«, planteó el mandatario de la antigua Unión Soviética. Cabe resaltar que la Unión Europea como la Organización de Naciones Unidas vienen aplicando duras sanciones a Rusia.
«Simplemente no hay volúmenes de repuesto en el mercado global, y las entregas desde otros países, principalmente Estados Unidos, que pueden enviarse a Europa, costarán mucho más a los consumidores», advirtió Putin. Estas duras declaraciones se dan semanas antes de que los compradores europeos tengan que saldar la provisión del gas ruso previo a las entregas del mes de abril. Todas aquellas naciones que sean hostiles deberán empezar a pagar los suministros con rublos.
Putin aprovecha la posición estratégica de su país
De esta manera, cambiar la moneda rusa implicaría violar las sanciones impuestas a Rusia. Esto se definió después de un análisis preliminar de la Comisión Europea. Ante esto, cabe destacar que la mayoría de los pagos deben saldarse en mayo fruto de los contratos que tiene el país conducido por Putin. Por el momento no está definido como responderán las naciones occidentales frente a estas responsabilidades económicas.
Para colmo, el presidente ruso habían alertado que cualquier negativa a pagar con el rublo redundaría en un corte de las entregas. Ya el mandatario reconoció que podría haber «problemas con los pagos por los suministros de energía de exportación rusos, ya que los bancos de los estados hostiles retrasan las transferencias de dinero», aseguró Putin.
