SALTA (Redacción) – Se está llevando a cabo el Censo Nacional 2022 el mismo que debería haberse realizado en el 2020 pero que la pandemia imposibilitó. La misma se organiza desde la Institución Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) y requiere de miles de voluntarios que se ofrezcan a realizarse las encuestas en todo el país. Por esa razón piden que se los reciba amablemente y se recuerda que no son empleados del Gobierno.
Benjamín Gebhard es el propietario de la consultora We y también fue censista en su pasado. Para un medio periodístico destacó la importancia de respetar a los encuestadores y se mostró a favor del Censo físico. «Como exencuestador y actualmente dedicado al oficio de investigación social, estoy en contra del censo digital. Voy a esperar al censista como corresponde, con mates y chipacitos«, destacó.
También se refirió sobre la modalidad virtual que ofrece el Censo 2022. «Es todo un desafío la bimodalidad. Es cierto que hay ventajas que tienen que ver con disminuir los tiempos y costos, no solo para recolectar la información sino también para procesarla. También da mayor tiempo para contestar, y lo otro es que se elimina la influencia del entrevistador sobre el entrevistador»; aclaró Gebhard.
En este sentido, se refirió a la «influencia no solo porque un encuestador puede sugerir una respuesta y la respuesta esté viciada. Sino porque hay gente que tal vez sienta cierto pudor de contar algún dato», agregó en este sentido. Por lo tanto, es probable que con el Censo Digital sea más fácil «decir la verdad» o brindar los «datos correctos» más que haciéndolo presencial donde el encuestador ve con sus propios ojos las condiciones habitacionales.
Por otro lado, el Censo Digital también tiene aspectos negativos como «la pérdida de una persona neutral con la pretensión de objetividad que evalúe. Queda la responsabilidad civil de cada persona de contestar algo, por ejemplo el material del piso, cuestiones habitacionales en las que si bien se puede mentir, pero alguien que está frente a vos podría ver que esa respuesta no es concordante con la realidad».
El encuestador no es representante del Gobierno
Un dato que por ahí tal vez no quedó claro es que los censistas o encuestadores no son funcionarios del Gobierno. Eso quiere decir que no representan los intereses del Poder Ejecutivo y solamente se ofrecieron como voluntarios para garantizar la realización del Censo. A su vez, pidieron estar atentos «porque hay casas sin trabas o patios sin cerca y cuando uno toca la puerta hay perros que ladran y ante el desconocimiento, atacan». También se pide a las personas tener en cuenta el clima. «El frío, la lluvia va complejizando el escenario, si llueve que intenten resguardar al censista bajo un techo», sintetizó Gebhard.
