SALTA (Redacción) – Julio De Vido fue uno de los ministros emblema del kirchnerismo. Permaneció los doce años que Néstor y Cristina Kirchner estuvieron en el poder. El también exlegislador manejó las obras públicas. Es por eso que es uno de los acusados de la Causa Vialidad y a quien responsabilizan tanto desde el Gobierno Nacional como desde la militancia kirchnerista por el favorecimiento a Lázaro Báez.
Es que el Gobierno Nacional cambió, una vez más, su narrativa. Prácticamente ninguno de los funcionarios del Frente de Todos negó que existiesen hechos de corrupción bajo los primeros gobiernos kirchneristas. Sin embargo, sostienen que es imposible que tanto Néstor como Cristina Kirchner hayan sabido pese a la estrecha relación que unía tanto a Lázaro Báez como el propio Julio De Vido con la pareja presidencial.
Lo cierto es que todo el oficialismo apuntó contra el propio Julio De Vido y José López, secretario de Obras Públicas. Incluso en el comunicado oficial publicado por el Gobierno Nacional se da a entender que la expresidenta desconocía los hechos de corrupción producidos en su administración. Algo que llamó la atención de propios y extraños
El reclamo al presidente
Esto motivó el enojo de Julio De Vido que reapareció para apuntar directamente contra Alberto Fernández. «Sr. Presidente, su nota es extemporánea, si fuera cierto lo que usted manifiesta nunca hubiera designado a Marcela Losardo como Ministra de Justicia, su nota es como el título del libro de Soriano: triste, solitaria y final», posteó en su cuenta de twitter.
Más allá del enojo del exfuncionario oficialista, Julio De Vido es acusado junto a otras 12 personas, incluida la vicepresidenta, de haber orientado la obra pública en la provincia de Santa Cruz para favorecer al empresario Lázaro Báez. El fiscal Diego Luciani pidió 10 años de cárcel y el embargo de sus bienes contra De Vido. Cabe destacar que el exfuncionario ya fue condenado por la Tragedia de Once aunque goza de prisión domiciliaria.