SALTA (Redacción) – Mucho se ha discutido desde que se confirmó que la Argentina va al ballotage. Una de las principales cuestiones es lo referido a la fecha en la que se realizará la segunda vuelta. El problema es que ese día también es feriado nacional y desde las autoridades oficiales no se cambió la fecha del mismo. Por eso el turismo está preocupado por la cantidad de personas que vacacionan esa fecha.
El feriado en cuestión es el 20 de noviembre por el Día de la Soberanía Nacional. Que no se pase la fecha al otro fin de semana genera preocupación tanto por la participación electoral pero también por lo que será el turismo. El 22 de octubre la cantidad del padrón que fue a votar fue del 77,6% que fue la segunda más baja desde la recuperación de la democracia.
Más allá de que la Cámara Electoral Nacional solicitó al Gobierno que se traslade el feriado. Sin embargo no se llegó a un acuerdo y coincidir la fecha de las elecciones con la de un fin de semana largo que podría ser aprovechado para hacer turismo. Un referente de la Cámara empresarial del sector habló con un medio salteño y reconoció los efectos del mismo.
Cancelaciones y cambios de planes para el turismo
Fue Juan Lucero, presidente de la Cámara de Turismo de Salta, reconoció que ya hay cancelaciones y se bajaron varias reservas. «Siempre las expectativas de los fines de semana largos son muy buenas, porque venimos trabajando muy bien», expresó. «En este está la incertidumbre porque hay una elección en el medio. Realmente lo mejor que podría haber pasado es que se pase el feriado, como lo había solicitado la Cámara Electoral, pero viendo que esto no va a pasar, le vamos a poner toda la fuerza y las ganas para que se trabaje».
A pesar de que las expectativas eran muy altas y positivas, la situación ahora cambió el panorama. Lo que sorprende es que las partes ya sabían que la fecha prevista para el ballotage caía justo con el feriado. «Siguen siendo buenas, pero sabemos que va a haber menos gente por el hecho de las elecciones. Así que es una lástima que no lo podamos utilizar, tanto los que van a viajar y no van a votar como para los que se van a quedar y no van a poder disfrutar del ‘finde’ largo. Es un perjuicio, así que a la expectativa de ver qué es lo que pasa», concluyó.
