SALTA – El oficialismo perdió el control del Concejo Deliberante y La Libertad Avanza ganó terreno en el departamento de Tartagal. El intendente, Franco Hernández Berni, enfrenta un duro revés político tras la renovación parcial que se dio en el recinto. Cuatro de las cinco bancas que pertenecían al oficialismo no fueron renovadas.
Esto obliga a una reconfiguración completo en el mapa político local y augura una gestión municipal con mayor resistencia legislativa. El nuevo Concejo tendrá mayoría opositora, con una fuerte presencia de La Libertad Avanza. Fuerza que se consolidó como el principal espacio opositor tras estas elecciones.
En este contexto, formarán parte del nuevo cuerpo deliberativo, Manuel Arenas, Lucrecia Díaz y Daniel Márquez, referentes del espacio libertario que llegó para quedarse y marcará una nueva agenda en el recinto.
De los actuales concejales, sólo dos lograron conservar su lugar: Armando Leguizamón, alineado con el oficialismo municipal, y Sergio Jure, representante del radicalismo tradicional. Ambos tendrán un rol clave en una minoría que deberá negociar constantemente con el nuevo bloque dominante.
La reconfiguración de Franco Hernández Berni
Una de las grandes sorpresas fue la elección de Emanuel Gallardo, del frente Democracia Territoriana, un espacio que no responde ni al oficialismo ni a La Libertad Avanza. Gallardo es un alfil del senador Manuel Pailler, quien así refuerza su influencia territorial y se posiciona como un actor determinante en la política departamental.
Con este nuevo panorama, Tartagal se encamina hacia una etapa de mayor polarización y pujas de poder. Franco Hernández Berni deberá redefinir su estrategia si pretende gobernar con un Concejo adverso y crecientes tensiones entre las fuerzas que hoy disputan el rumbo político del municipio.
