SALTA (Redacción) – El secretario general del sindicato de mecánicos SMATA, Ricardo Pignanelli, aseguró que una reforma laboral significa “precarizar el laburo”, y remarcó que “no puede pasar con un gobierno peronista”. Sin embargo, explicó que no tiene “miedo” de discutir una modernización de los convenios colectivos de trabajo, como impulsaría el presidente electo, Alberto Fernández.
«No tenemos miedo con la discusión de los convenios»
En este sentido, el dirigente sindical argumentó: “Los convenios siempre se fueron adaptando. En nuestra actividad, la evolución es continua. Por eso, no tenemos miedo con la discusión de los convenios”. Al mismo tiempo, planteó que “modificar la ley de Contrato de Trabajo es precarizar el laburo, eso es algo que no puede pasar ni con un Gobierno peronista”.
Cabe recordar que la modificación de esta legislación venía siendo discutido durante la administración de Mauricio Macri, pero no se generó el contexto propicio para su abordaje. Por su parte, Pignanelli rechazó, en una entrevista radial, los regímenes de pasantías: “Son un modelo que hay que enterrar porque nunca sumó más trabajo. Lo único que hizo fue precarizarlo”.
Según los trascendidos, el próximo presidente Fernández tendría previsto abrir negociaciones de los convenios colectivos de trabajo para que, por ley, se actualicen. Aunque, antes de generarse las condiciones necesarias para el debate en el Congreso, se realizarán negociaciones sector por sector entre los sindicatos y los empresarios, avalado por el Estado Nacional.
«Ese bono que tenemos nosotros solo sirve para tapar agujeros»
En tanto, Pignanelli analizó de las propuestas del líder del Frente de Todos quien asumirá el 10 de diciembre próximo, y minimizó el pago de un bono de fin de año para los trabajadores del sector privado. Sobre este tema que genera muchas expectativas encontradas entre los sindicalistas, el titular de SMATA explicó que los mecánicos “todos los años tenemos pautado” un plus salarial de este tipo.
“En realidad, ese bono que tenemos nosotros solo sirve para tapar agujeros e irse cuatro o cinco días de vacaciones”, bromeó en el reportaje y concluyó con una descripción de la crisis que atraviesa el sector automotriz: “Este año no vamos a llegar a 320 mil unidades producidas, cuando en las buenas andábamos en 840 mil. Es que en octubre del año pasado reventó con todo. Y ahora estamos yendo para atrás”.
