SALTA (Redacción) – La Sala I del Tribunal de Juicio emitió una condena contra una mujer que realizaba intervenciones quirúrgicas para interrumpir embarazos de forma clandestina en la ciudad de Salta. Precisamente, se trata de Mabel Leonor Vaca de 55 años, que fue hallada culpable por los delitos de aborto y ejercicio ilegal de la medicina.
De acuerdo a los términos de la resolución, la enfermera de 55 años fue condenada a dos años prisión de ejecución condicional en un proceso de juicio abreviado. Por este motivo, la mujer pudo recuperar su libertad al finalizar la audiencia, aunque tiene terminantemente prohibido reincidir en estas actividades ilegales.
La investigación de la Justicia de Salta acerca de Vaca comenzó en agosto del año pasado. En ese momento, los profesionales de la salud del Hospital Papa Francisco debieron atender de urgencia a una joven de 27 años. Rápidamente, constataron que la paciente presentaba un aborto infectado, por lo que tuvieron que operarla en el momento.
En ese momento, los médicos que atendieron el caso se dieron cuenta con la muchacha se había sometido a un procedimiento ilegal para interrumpir su embarazo, con el agravante que casi le produce la muerte. Por ese motivo, los responsables del nosocomio provincial radicaron la correspondiente denuncia.
Desde entonces, los investigadores reportaron importantes avances en la causa, principalmente con el respaldo de la información que encontraron en el teléfono celular de la víctima. A partir de estos datos, descubrieron que la persona que se había encargado de llevar a cabo el aborto residía en la zona sudeste de la capital.
En cuestión de días, la Justicia resolvió que se llevara a cabo un allanamiento en el domicilio que había sido referencia en el intercambio de mensajes que las mujeres habían realizado antes de la fallida intervención. Al llegar al lugar, procedieron a detener a Vaca y, también, secuestraron todos los elementos y fármacos que utilizaba para llevar a cabo los abortos.
A partir de su arresto y la cantidad de evidencia que había en su contra, la enfermera evitó estirar su defensa en el tiempo y, por ello, solicitó que se llevara a cabo un juicio abreviado. Ante el Tribunal, Vaca se declaró culpable de los cargos que le habían imputado y, frente a esta posición, se resolvió su condena.