SALTA (Redacción) – Después de una reunión privada con Alberto Fernández, el ministro Martín Guzmán tomó la decisión no asistir a la Cumbre del G20 ya que su intención es priorizar el acuerdo final con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y así poder postergar los vencimientos de este año. Lo que resta definir son los detalles y precisiones sobre el ajuste en tarifas y recortes fiscales.
Quien viajará en lugar de Martín Guzmán será Sergio Chodos, el representante argentino ante el FMI y que tendrá como tarea lograr empatizar con otros países que forman parte del organismo internacional. El objetivo de alcanzar el apoyo de otros países es conseguir mayor respaldo para la eliminación de los sobrecargos en las tasas de interés que cobran por su crédito y poder acceder a la distribución adicional de Derechos Especiales de Giro.
No obstante, Martín Guzmán tendrá una mínima participación en la tradicional Cumbre y será bajo la modalidad virtual. Participará con diferentes titulares de los bancos centrales el próximo viernes. Además, y quizás ayude a comprender la ausencia del ministro de Economía, tampoco asistirán la directora del organismo, Kristalina Georgieva, ni la vicedirectora, Gita Gopinath, aunque lo harán virtualmente.
Lógicamente, que este pedido del jefe de Estado a su funcionario es porque buscan definir lo más rápido posible el acuerdo definitivo que vaya al Congreso de la Nación, donde deberá ser puesto a discusión y necesitará ser respaldado por los legisladores nacionales. En caso de que no sea aprobado, el país podría ingresar en default y por eso preocupa las últimas declaraciones del kirchnerismo más duro.
A pesar de las contradictorias reflexiones del presidente Fernández sobre Rusia y China, desde el interior del oficialismo aseguran que no hay ningún conflicto con el FMI y que la negociación se dará con total normalidad, a pesar de las augurios negativos que se profesaron. No obstante, claro está que las declaraciones del jefe de Estado no han caído bien aunque no tenga consecuencias.