SALTA (Redacción) – En Moscú, Alberto Fernández le dijo a Vladimir Putin que pretendía ser “la puerta de entrada” de Rusia en América Latina. Posteriormente en China, hubo fuertes alabanzas al Partido Comunista y hasta le dio una ofrenda al dictador fallecido Mao Tse-Tung, responsable de la muerte de más de 50 millones de personas.
En este contexto, el presidente defendió su gira por Rusia y China y aseguró que su presencia en estos países no tuvo repercusión negativa. “No recibí ninguna declaración pública de ningún funcionario preocupado por lo que dije. Leí páginas escritas hablando del malestar que hay en Washington, que no entiendo, deben estar más preocupados por temas más importantes que la Argentina”, expresó.
Alberto Fernández volvió a mostrarse cercano a Rusia e hizo hincapié en la política de relaciones exteriores del país. “Creo que lo que dije es una verdad de perogrullo. Si uno piensa, nosotros tenemos un gran acreedor por la preeminencia de EEUU en el Fondo. Me pregunto qué dije de novedoso, siento que no dije nada novedoso sino que todos sabemos”, sentenció.
“No creo que nadie se haya molestado por eso. Lo digo desde siempre estando en Buenos Aires, no viendo a Putin. Le dije lo mismo que digo públicamente. Con Estados Unidos tenemos que mantener relaciones respetuosas, serias y responsables como las que mantenemos con China, Rusia, Alemania, Chile, Uruguay o cualquier país del mundo porque creemos en el multilateralismo y lo practicamos”, aseguró.
Por último, criticó los cuestionamientos a la política exterior del Gobierno Nacional. “Es el camino que la Argentina tiene que tomar. Algunos siguen creyendo que hay un mundo bipolar con los comunistas del este y los occidentales del oeste pero ese mundo no existe más. Sería bueno que miremos cómo funciona el mundo. Cada día estoy más convencido de la necesidad de vínculos multilaterales. Si encuentro en China y Rusia interés por mejorar sus vínculos con Argentina, bienvenido sea y si EEUU quiere lo mismo, bienvenido sea”, concluyó Alberto Fernández.