SALTA (Redacción) – La tan ansiada visita de Patricia Bullrich se concretó ayer con la presentación del Plan Güemes. Con esta medida se firma un acuerdo en el cual Nación combatirá junto a la provincia el crimen organizado y el narcotráfico en la frontera. Junto al gobernador Gustavo Sáenz se comprometieron a poner fin a cualquier acto criminal que perturbe la vida de los argentinos.
Tal cual lo esperaban el mandatario provincial, Adrián Zigarán en su rol de interventor municipal, el intendente Baltasar Lara Gros y los vecinos de norte salteño, las fuerzas federales ya se radicaron en Salta. A todo esto, Bullrich confirmó una «guerra sin cuartel» en contra del crimen organizado.
«Venimos a contarles que esta frontera en Aguas Blancas, en el lugar más importante en la que el estado argentino, a nivel de su estado provincial tiene que tener presencia para cuidar nuestros bienes y la economía. Venimos con las fuerzas federales, con gendarmería reforzada a su máximo nivel«, anunció con bombos y tambores la ministra Bullrich.
A su vez, remarcó que «la policía federal reforzada y una nueva fuerza en Aguas Blancas que por primera vez vamos a tener autoridad para el río, no solamente nuestros vecinos de Bolivia serán quienes determinen el cauce del río sino la prefectura naval argentina en nuestros ríos mares y lagos».
Bagayeros y comercio ilegal
Uno de los principales reclamos que hace Zigarán como interventor de Aguas Blancas es que a los bagayeros no le compliquen la vida. «Entendemos que esto lo tenemos que hacer con sistemas simples, que la exportación o importación no es lo mismo que cuando viene un barco cargado al puerto de Buenos Aires, pero sí tenemos que lograr enfocar que la ruta nacional 34 el paso de Aguas Blancas y Bermejo tengan una nueva modalidad y no se dispersen a lo largo de la frontera. vamos a ir encausándolos», añadió.
Para concluir contó que «vamos a atender las nuevas modalidades de los narcos como los puentes flotantes». Finalmente, enfatizó que «miles de familias ponen en riesgo su vida porque no tenían otra forma de llevar el pan a su hogar. Porque no veían salida alguna, pero hoy tienen el respaldo de un gobierno nacional y local que va a devolverles a fondo esa dignidad», prometió Bullrich.
