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El útlimo vuelo de Kate Middleton y Guillermo no fue tan ecológico como se pensaba

¿Estuvieron enterados los duques de Cambridge sobre lo que pasó?

Fuente: Cordon Press

Sigue la polémica por los vuelos de los duques de Inglaterra. Hace unos días te contábamos que Kate Middleton y el príncipe Guillermo le habían dado un baño de humildad a Meghan Markle y el príncipe Harry, quienes las últimas semanas recibieron miles de comentarios negativos que los acusan de hipócritas, ya que siempre apoyan al ecologismo pero eligieron viajar hasta Ibiza, con su hijo Archie, en un vuelo privado. Además, repitieron esta elección cuando visitaron a Elton John en Francia.

Recientemente, Ken Wharfe, quien fue el guarda espaldas de la princesa Diana durante casi 10 años, hizo saltar la chispa en Reino Unido. En una entrevista a Vanity Fair USA, dijo que los duques de Sussex son unos hipócritas por decir una cosa y hacer otra: “Francamente, es hipócrita. Harry no puede estar predicando sobre los efectos catastróficos del cambio climático mientras vuela alrededor del mundo en avión privado. Está muy bien ponerse de pie y predicar, pero que el público verá esto como hipócrita. ¿Por qué poner otro avión en el aire cuando se puede viajar en uno comercial?”.

Esto es lo que se pregunta Ken mientras recuerda que durante sus años al servicio de Lady Di (la madre de Harry y Guillermo) “la mayoría de los vuelos que tomamos fueron comerciales en British Airways” y nunca hubo problemas de privacidad en las “numerosas vacaciones que tomamos en el Caribe con Diana, Guillermo y Harry”.  Otro que salió al cruce de los duques fue Paul Ekins, el co-director del Centro de Búsqueda de energía de Reino Unido y fundador del Partido Verde, quien aseguró que Meghan y Harry deben practicar lo que predican si no quieren “devaluar la causa a la que apoyan”.

Para su viaje a Niza, según informa la prensa británica, los duques volaron en una nave de 12 plazas de la empresa Cessna, alquilándola por 20 mil euros. Las emisiones de dióxido de carbono de este avión en particular serian siete veces mayor a la de un vuelo comercial. Ni bien aterrizaron en Francia, Meghan con Archie en brazos y Harry con gorra y lentes de sol, los esperaron responsables del aeropuerto y miembros del equipo de seguridad, que los llevaron en auto hasta el lugar donde se alojaban.

Allí los alojó el cantante Elton John, que salió a defenderlos en sus redes sociales. En la publicación, compartida en sus cuentas oficiales de Instagram y de Twitter, el cantante afirmó: “Me siento consternado por la manera en la que la prensa ha malinterpretado de manera malintencionada todo lo concerniente al viaje privado del duque y la duquesa de Sussex a mi casa en Niza la semana pasada”. La mansión donde estuvieron parando los padres primerizos fue construida en los años 20, y el artista ingles la adquirió en la década del 90. Está ubicada en Niza y cuenta con un ambiente lleno de vegetación y una magnifica vista a la bahía y a los Alpes.

Lo cierto es que Kate Middleton y el príncipe Guillermo no se quisieron arriesgar y viajaron hasta Escocia, junto a sus tres hijos, en un vuelo de 73 libras, que salió a las 8 de la mañana desde el aeropuerto de Norwich. Cabe destacar que también optaron por la compañía low cost FlyBe, lo que deja aún más expuestos a los duques de Sussex. Claro que esto se suma a los rumores de mala relación entre ambas parejas, que hace meses vienen mostrando señales de distanciamiento.

Sin embargo, ahora resulta que el vuelo de la familia real de Cambridge no fue tan ecológico como se pensaba. Según reveló el medio The Daily Mail, su traslado supuso alquilar dos aviones vacíos. El vuelo que los llevaba de Norwich a Aberdeen era uno regular, operado normalmente por la empresa Loganair en representación de la compañía área Flybe. Pero esta última al enterarse que iban los duques a bordo, decidió fletar uno de sus propios aviones para tener la oportunidad de publicitar su logo. El problema es que el vuelo de Loganair que debería haber tenido a Kate, Guillermo y sus hijos partió de todos modos, pero totalmente vacío, lo que unido al vuelo igualmente sin pasajeros de Flybe hasta Norwich para recogerles supuso una emisión extra de 4,5 toneladas de emisiones de dióxido de carbono.

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