Angelina Jolie rompió el silencio y habló sinceramente sobre cómo ha sido afectada por el cáncer. La actriz de 44 años colaboró con la nueva edición de Health Innovation para la revista TIME, escribiendo un ensayo personal donde habló sobre cómo los avances en la investigación y el tratamiento del cáncer de mama deberían ir acompañadas de más reflexión sobre la seguridad, la dignidad y el cuidado que debe tener la mujer.
La madre, la abuela y la tía de Jolie murieron de cáncer. En 2013, la actriz se sometió a una mastectomía doble preventiva y, en 2015, le extirparon los ovarios y las trompas de Falopio como medida preventiva contra el cáncer después de hacerse un análisis de sangre que revelaron un riesgo estimado de 87 por ciento de riesgo de contraer cáncer de mama y un 50 por ciento riesgo de cáncer de ovario.
Una clara decisión de vida
«A menudo me preguntan cómo me han afectado mis decisiones médicas y cómo he decidido hacerlas pública», escribe Jolie. «Simplemente siento que tomé decisiones para mejorar mis probabilidades de estar para ver a mis hijos convertirse en adultos y de conocer a mis nietos. Mi esperanza es darles tantos años como pueda a sus vidas para ayudarlos a crecer», agregó. Claramente, Jolie se mostró devastada por la muerte de su madre, Marcheline Bertrand, quien murió en 2007 después de una larga batalla contra el cáncer de ovario y de mama. Bertrand tenía 56 años.
«He vivido más de una década sin una madre», escribió. «Conoció solo a algunos de sus nietos y a menudo se encontraba demasiado enferma como para jugar con ellos. Ahora es difícil para mí considerar cuando pienso en cuánto se habrían beneficiado sus vidas de poder pasar tiempo con ella y la protección de su amor y su gracia. Mi madre luchó contra la enfermedad durante una década y llegó a los 50 años. Mi abuela murió a los 40 años. Espero que mis elecciones me permitan vivir un poco más», agregó.
En lucha con la herencia familiar
La madre de seis hijos señaló que lidiar con sus problemas de salud la ha acercado a otras mujeres. «Tengo un parche para las hormonas y necesito hacerme chequeos de salud regularmente», señala la actriz. «Veo y siento cambios en mi cuerpo, pero no es algo que me importe demasiado. Estoy viva, y por ahora estoy manejando todos los diferentes problemas que heredé con gran éxito. Me siento más conectada con otras mujeres, y a menudo tengo conversaciones muy personales con extraños sobre la salud y la familia», señaló.