Salma Hayek intentará cualquier cosa para entrar en el personaje, incluso si se trata de un procedimiento cosmético. La actriz de 53 años interpretará a la magnate de la belleza Claire Luna en la próxima película «Like a Boss» y para sentirse más como su personaje, Hayek quiso cambiar su aspecto radicalmente. Según las fuentes, la actriz pensó que las inyecciones de labios serían suficientes.
«Al principio, la parte era interpretar a una empresaria muy directa y ambiciosa», dijo la actriz en su entrevista con la revista InStyle. «Fue divertido trabajar con Miguel y los escritores para crear un personaje realmente loco», agregó sobre su trabajo con el equipo de producción de la película. Para mirar más allá, Hayek consultó a un médico. «Primero, quería hacer Botox e inyectarme los labios, lo que nunca antes había hecho», dijo la actriz.
Un primer y último intento
«Mi amigo dermatólogo, el Dr. Maurice Dray dijo: ‘No sé si vas a ser feliz porque te va a doler mucho’. Le dije: ‘Bueno, vamos a intentarlo’. Me puso la primera aguja en la boca e inmediatamente dije: ‘¡No! ¡Olvídalo! ¡Ya terminé!», dijo la actriz sobre el procedimiento cosmético. Entonces, en lugar de alterar su apariencia, Hayek fue con dientes falsos para hacer que su boca se viera más pronunciada. La actriz dijo que no volvería a un médico cosmético en el corto plazo.
Hayek expresó: «Mi madre siempre demostró la importancia de envejecer con gracia. Nunca la vi a ella ni a mi abuela temiendo envejecer. Y por eso no tengo ese miedo», agregó. La actriz ha sido muy clara respecto a no dejar que su trabajo en Hollywood dicte cómo va a vivir su vida. La actriz de 52 años entró por primera vez en la escena de la película hace 24 años en «Desperado», y en 2019 luce exactamente igual a entonces. la actriz dijo a la revista Town & Country en una entrevista que su buena apariencia no se debe a la cirugía plástica.
Una vida muy ocupada
«No he hecho nada», admitió. «No sé cómo explicarlo». Uno podría pensar que es por sus elecciones de comida, o porque bebe mucha agua. Sin embargo, la estrella señaló que «a veces bebo mucho, otros días no». Hayek se mantiene ocupada actuando, con su compañía de producción, Ventanarosa, y con el activismo social en temas como los derechos de las mujeres y la violencia doméstica. La nominada al Oscar también acreditó su éxito en la vida y su carrera por ser una flor tardía.