Adele cautivó en la fiesta posterior a los Oscar organizada por JAY-Z y Beyoncé el domingo por la noche. La cantante de 31 años brillo ante la mirada de todos los asistentes a la fiesta que organizó la pareja, y los fanáticos no podían creer su drástica pérdida de peso. Con un brillante vestido estampado de leopardo y aretes de aro, la cantante de «Hello» deslumbró, pero fue su figura notablemente esbelta la que hizo que todos hablaran de ella.
Un asistente a la fiesta publicó una foto en Instagram de la cantante, con una leyenda traducida que detallaba cómo la estrella de la música parecía «delgada como una coma». La salida se produjo solo semanas después de que un fanático hablara sobre su encuentro con Adele durante sus vacaciones en Anguila, donde la cantante le dijo que había perdido 100 libras.
Un encantador encuentro
«Ella dijo que perdió algo así como 100 libras, y que fue una experiencia muy loca y positiva», dijo el fanático Lexi Larson a la revista People. «Parecía muy feliz y lucía increíble. Parecía realmente segura de sí misma», agregó. La cantante realmente se veía increíble durante las vacaciones, donde fue vista luciendo un sexy vestido de verano. Anteriormente la estrella mostró su figura más delgada en una publicación de Instagram en Navidad.
Según diversas fuentes, la exentrenadora de la cantante, Camila Goodis, afirmó en una entrevista que la pérdida de peso se debió a que Adele transformó su dieta llegando a consumir alrededor de 1,000 calorías por día. En una nueva entrevista, Lexi Larson, una estudiante universitaria de 19 años, habla sobre su encuentro. Adele fue vista por primera vez en Anguila a principios de este mes, mientras disfrutaba de un día de playa con Harry Styles.
Reunida con amigos
Lexi, junto con algunos amigos, se sorprendieron cuando entraron al restaurante Blanchards y vieron a Harry cenar adentro, dijo la adolescente a la revista People. «Unos minutos más tarde, Adele se acercó y se sentó a mi lado y dijo: ‘Entonces, ¿qué puedo hacer por ustedes, chicas?'», recordó Lexi. «Estábamos muy emocionadas. Estuvimos hablando con ella por un rato, y luego hizo que Harry Styles viniera y se sentara con nosotras también».