SALTA (Ricardo Mena-Martínez Castro) – La ley 25566 conmemorativa del día del historiador, es una merecida ley del Congreso de la Nación que recuerda la feliz medida del Primer Triunvirato de la Patria que, con el fin de que se perpetúe la memoria de sus héroes y de nuestra revolución del día 25, como también según lo expresa textualmente, resaltar las virtudes de los hijos de esta nación sudamericana y la memoria de nuestra independencia civil de los poderes españoles.
Esta ley nace a principios del año 2002 y fue el Dean Gregorio Funes quien escribió su Ensayo de la Historia Civil del Paraguay, Buenos Aires y Tucumán como así también un pequeño apartado que se llamó “Bosquejo de la Revolución”.
Estos trabajos del Dean Funes fueron interpretados como la exégesis primigenia de los acontecimientos ocurridos el lejano 25 de Mayo de 1810, aún fresco en la memoria de quienes la escriben.
Sabemos que un historiador es la persona que estudia los acontecimientos del pasado. En definitiva, es quien estudia los hechos pretéritos, tal vez como si fuera un político de entonces, pues sus argumentos y estudios no dejan de tener una determinada inclinación, según sean sus tendencias y pensamientos.
Es decir que las funciones más comunes del historiador, aparte de desentrañar los hechos del pasado, son las de recoger información de fuentes confiables, tanto noticias como fotografías que vienen a desempeñar verdaderos documentos; es entonces cuando el historiador vuelca en el papel su análisis e interpretación.
Ricardo Mena-Martínez Castro