En las últimas horas, Mauro Viale pasó a ser una figura muy discutida dentro del campo laboral del periodismo mayoritariamente por muchas exintegrantes mujeres de sus programas o emisora, como en su tiempo de gerente de Radio Rivadavia. Nancy Pazos, Marcela Coronel, Pilar Smith, Analía Franchín y hasta Beto Casella, del plano masculino. Sin embargo, el padre de Jonatan recibió su primera banca pública.
Se trata de Tomás Dente, quien en diálogo con Ciudad Magazine se refirió a su figura. “Mauro tiene una forma de ser cáustica, sé que es mordaz y peleador al aire. Pero entiendo que es el combo perfecto para que un tipo como él se perpetuara en la tele por más de 40 años de forma ininterrumpida. En algún punto esa forma de ser, ese cúmulo de características inherentes a la forma de hacer periodismo le garantizaron su permanencia». indicó.
Luego, el integrante de «Nosotros a la mañana» amplió lo que él sintió al trabajar con Mauro Viale. «Conmigo Mauro fuera de cámara fue el tipo más dulce y cariñoso con el que trabajé. Y eso que trabajé con mucha gente, pero él fue el más paternal, afectuoso y amoroso. No sé si es que era algo especial conmigo, que me atesoró como a un hijo. No lo sé, pero siempre fue de lo más cariñoso y atento que conocí”, aseveró.
La banca de Tomás Dente a Mauro Viale
A su vez, el comunicador de espectáculos fue consultado sobre si experimentó un destrato del conductor a otra persona. «Nunca. Jamás. Capaz que no se acuerdan, pero en el programa yo le discutía todo a Mauro. Todas las mañana teníamos una pelea diferente, más o menos efervescentes. Sin embargo, yo lo tomaba como un juego televisivo, nunca lo personalicé. Mi vida personal tuvo un antes y un después de él. Mauro fue una bisagra y después de él yo me consolidé mucho más. Él me dio una contundencia y presencia en los medios que fue trascendental», manifestó.
Por último, Tomás Dente contestó si sabe por qué salieron algunos colegas a arremeter y pegarle a Mauro Viale de forma reciente. «No sé si el verbo es que le pegan. Cada uno tiene derecho a contar su experiencia y está bien, no soy quién para juzgar. Yo puedo contar lo que me pasó a mí. Habría que preguntarle a los demás por qué cuentan sus malas experiencias y si lo sintieron así, está muy bien», selló.
