ESPECTÁCULOS

Mollejas con caviar: el extraño plato con el que el Turco García hizo su debut en MasterChef Celebrity

El ex jugador de Racing avisó que la cocina no era lo suyo.

Claudio García, más conocido como El Turco García debutó en MasterChef Celebrity con una combinación más que extraña que se viralizó en las redes rápidamente. El excéntrico ex futbolista supo vestir las camisetas de Huracán, Racing, Vélez, Colón, All Boys e Independiente Rivadavia en su extenso paso por el fútbol argentino. Actualmente, desde otro rol, demostró que dará de qué hablar en la pantalla chica.

En su debut en el reality gastronómico, el Turco quiso hacer algo simple y darle un toque gourmet con la limitada cantidad de ingredientes que eligió con los ojos vendados. Entonces, el jugador eligió una rarísima mezcla de sabores que en los papeles parecería incompatible: mollejas con caviar. El participante llevó frente a los jurados una molleja en el centro, acompañada con dos generosas porciones de caviar.

«Es una molleja rústica, el caviar lo puse como decoración. Yo quería hacer algo distinto», explicó el deportista convencido de sus logros. Donato de Santis fue el primero que le llevó malas noticias al Turco García en Masterchef Celebrity. «Bueno, Turco, la molleja está amarga, un poco pasada de cocción. Tenés mucho para aprender, pero no pierdas el entusiasmo».

Por su parte, Germán Martitegui, firme en su personaje exageradamente antipático, resumió: «Yo le cambiaría el nombre, le pondría ‘Turco en la neblina’. Yo estoy seguro de que vos no te comés este plato», dijo. Aseveración que García contestó con un golpe de realidad: «Con todo respeto, yo vengo de Fiorito, de Lugano, así que yo lo comería. Yo como cualquier cosa. La molleja para mí está bien».

No hubo caso. Por una mala combinación que le jugó en contra (incluso más que la inexperiencia), el Turco quedó en zona de riesgo frente a la primera eliminación de este próximo domingo. Y, aún resignado, hasta último momento siguió defendiendo su elección: «Yo le puse el caviar como decoración. Pero, bueno, de los errores se aprende», dijo comprensivo al volver a su mesada.

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