SALTA (Redacción) – La víctima del robo fue una comerciante jubilada de 64 años de edad, quien reside en el barrio Tres Cerritos. Antes de dirigirse a comprar mercadería para un negocio que posee en la localidad de El Galpón, la mujer ya tenía decidido pasar por un sanatorio privado para visitar a su nieto. Justamente, permaneció el lugar durante algunas horas y, al salir, se dio con el saqueo de su automóvil, que había dejado estacionado frente al centro médico.
En su relato sobre el ilícito, según lo informado por fuentes policiales a Salta 4400, la comerciante comentó que había dejado su casa con el dinero. Además, precisó que el monto que portaba consistía de una suma aproximada de 193 mil pesos, que estaban conformados entre fondos propios y de otros parientes. A su vez, la víctima agregó que este monto estaba destinado a la compra de ropa para su local comercial, dato que solo conocían algunas personas de su entorno más cercano.
Otro dato relevante que la mujer aportó en sede policial fue que para llevar a cabo la adquisición de esa mercadería debía emprenden un viaje junto a su hermano. Sin embargo, les contó que, antes de cumplir con esta acción, había decidido pasar a visitar a un nieto, quien se hallaba internado en una clínica privada de calle Laprida al 100. Por ese motivo, esa jornada se trasladó hacia esa institución médica en su vehículo, al que aseguró haber dejado cerrado.
Posteriormente, la comerciante sostuvo que permaneció en el interior de la clínica a lo largo de tres horas aproximadamente y que, antes de partir del lugar, revisó su auto y se percató de que el baúl estaba abierto. Rápidamente, abrió por completo el compartimiento, a fin de verificar que el bolso con el dinero todavía estuviera en ese lugar. Sin embargo, no encontró nada. Presa de la desesperación por el robo que había sufrido, la víctima comenzó a interrogar a vecinos y transeúntes, pero nadie le pudo aportar algún dato certero.
Visiblemente angustiada por esta situación, la mujer alertó a la policía sobre el saqueo de su vehículo. En minutos, un patrullero arribó al lugar para asistir a la víctima, quien minutos más tarde se dirigió hacia la comisaría Quinta para radicar la denuncia correspondiente. Mientras la comerciante brindaba testimonio acerca de todos los hechos que habían rodeado al hurto del dinero que se hallaba en el baúl de su vehículo, los investigadores comenzar a realizar las pericias pertinentes sobre el rodado.
A partir de la denuncia, la policía informó que el automóvil de la mujer no presentaba señales de violencia, por lo que consideran que la persona, o el grupo que haya perpetrado el delito, utilizó con una llave similar para ingresar al vehículo. Incluso, sospechan que los delincuentes conocían de antemano los movimientos de la comerciante, por lo que la investigación no descarta encontrar algún posible cómplice entre los familiares y amigos de la denunciante.
Por otra parte, fuentes policiales informaron que trabajan a fin de elaborar un registro de las cámaras de video de la zona, con las cuales esperan conocer cómo se produjo el robo y, sobre todo, dar con la identidad del o los ladrones, puesto que el saqueo ocurrió en horas de la tarde. No obstante, la principal hipótesis se mantiene sobre la conjetura de que el robo fue planeado por alguien cercano a la familia, pues conocía del dinero y el itinerario de la comerciante.