SALTA (Redacción) – Una insólita situación ocurrió anoche en la Comisaría 40 de la localidad de Salvador Mazza. Los efectivos detuvieron a un familiar de uno de los individuos que se encuentra alojado en ese lugar, debido a que intentó pasarle una dosis de marihuana escondida en un mate de plástico.
De acuerdo con la información que suministraron las autoridades locales de la Policía de la Provincia de Salta, un sujeto arribó a la dependencia ayer por la noche. En ese momento, el hombre se presentó como familiar de uno de los reos. Por entonces, el horario de visitas había concluido y, por ese motivo, le comunicaron que no podría dialogar con su pariente.
Igualmente, esta negativa no le generó ningún tipo de malestar al joven de 21 años, quien advirtió que solo había concurrido a la comisaría para dejarle algunos alimentos al detenido. Ante ello, el individuo les dio una bolsa con elementos comestibles a los oficiales para que oportunamente se los brindaran al recluso.
Como marca el protocolo de las fuerzas de seguridad, los uniformados revisaron detalladamente todos los productos y materiales que habían sido entregados. Cuando uno de los efectivos tomó el mate de plástico, descubrió que se podía dividir en dos partes y, de esa manera, encontró sustancias vegetales ocultas en este compartimiento.
Por ese motivo, al familiar del detenido se le prohibió su salida de la comisaría hasta que se determinara qué era este producto. Minutos más tarde, los especialistas de la División Drogas Peligrosas del Sector 23 presentaron los resultados del examen, que arrojó positivo para marihuana. Desde ese momento, el sujeto se encuentra a disposición de la Justicia.
Cayó peligroso ladrón en la capital
La policía arrestó a un peligroso ladrón, quien recientemente había perpetrado numerosos robos a viviendas y establecimientos comerciales en los barrios Intersindical y Miguel Aráoz de la ciudad de Salta. Desde los ilícitos denunciados, los investigadores se encargaron de seguir el rastro del malviviente a partir de los registros de las cámaras de Video Vigilancia.
Con la colaboración de personal de la División de Criminalística, los agentes lograron dar con el paradero del sospechoso después de algunos días de trabajo. Finalmente, el malviviente de 23 años fue detenido cerca de su casa. Cuando los uniformados inspeccionaron el inmueble, no solo hallaron las herramientas que el sujeto utilizaba para poder irrumpir en los inmuebles, sino que también procedieron al secuestro de numerosos dispositivos electrónicos, cuyo valor aproximado superaba los 90 mil pesos.