SALTA (Redacción) – Detuvieron a un hombre que había perpetrado un robo en un jardines de infantes. Precisamente, los efectivos lograron recuperar todos los elementos que el malviviente había sustraído. Al mismo tiempo, esclarecieron otro delito similar, aunque aún no arrestaron al autor del hecho. En primer lugar, indicaron que el delincuente se había apoderado de numerosos bienes. Sin embargo, los uniformados lo interceptaron cuando intentaba huir del lugar. En el segundo caso, descubrieron la ubicación de los bienes que habían sido sustraídos.
De acuerdo con la información que suministraron las autoridades locales de la Policía de la Provincia de Salta, estos delitos tuvieron lugar en las localidades de Tartagal y Salta. Respecto al primero de estos hechos, indicaron que los agentes tomaron conocimiento por medio de un llamado al Sistema de Emergencias 9-1-1. Cuando arribaron al establecimiento, constataron el faltante de numerosos elementos y, por ese motivo, comenzaron la búsqueda del autor del delito.
A partir de ese momento, varias unidades policiales se desplegaron por los alrededores de este jardín, que está situado en la calle Gorriti al 300 de la ciudad norteña. Minutos después, uno de los móviles localizó a un individuo de 31 años que estaba caminando por el sector. Cuando se acercaron a él, constataron que poseía una enorme cantidad de elementos. Inmediatamente, comprobaron que eran los bienes que habían sido rodados. Entre los mismos, habían un parlante portátil. una pava eléctrica, una pileta de lona, un reproductor de DVD y una bolsa de tela.
Robo en la capital
En tanto, el segundo de los ilícitos había sido cometido días atrás en la capital. Precisamente, los directivos de una institución del barrio Juan Manuel de Rosas denunciaron en sede policial que habían robado más de veinte sillas de plástico para niños. Ante ello, la coordinadora del jardín de infantes le reclamó a los efectivos que actuaran con la mayor rapidez posible para resolver este caso. Desde entonces, buena parte de los uniformados se dedicaron a la investigación de este suceso.
En esa línea, a los oficiales solo les tomó algunos días poder encauzar la indagación. Después de haber recolectado varias pistas, los efectivos de la Comisaría 103 pudieron establecer identificar dónde se encontraban los bienes. Curiosamente, las 21 sillas de plásticas se hallaban en el interior de la casa de una vecina del barrio. Sin embargo, la mujer le contó a los agentes que se las había comprado a un individuo. Por este motivo, todavía continúa la búsqueda del autor del delito.