SALTA (Redacción) – Hace dos días, los salteños se mostraban consternados tras conocerse una alarmante noticia. Se trataba de un allanamiento a una iglesia evangélica que lejos de ser un templo, era la sede de una red criminal organizada abocada a la trata de personas. Se trata de la iglesia “Filadelfia” que dejo expuesta las falencias históricas del sistema político y judicial, con un prófugo como saldo de los operativos.
Fue el martes cuando las fuerzas de seguridad dispusieron todos sus recursos para irrumpir en una vivienda ubicada en pleno centro. Fue en el marco de los 23 operativos que se desplegaron ese mismo día en distintas provincias del país, acciones que lograron desbaratar una organización criminal conocida como Templo Evangélico Filadelfia. Los mismos actuaban bajo un falso evangelio para captar gente y utilizarla para su beneficio económico.
Los procedimientos efectuados en la capital tuvieron lugar uno en calle Zuviría 1320, a cargo de la Policía Federal Argentina, y el otro en calle Luis Borja Díaz al 600, donde actuó personal de la Unidad de Delitos Complejos y Procedimientos Judiciales Salta de la Gendarmería Nacional. Allí detuvieron a dos personas, una mujer y un hombre ambos de 53 años, quienes se hacían pasar por líderes religiosos.
En tanto, «un tercer sospechoso no se encontraba en el momento del allanamiento y ya se libró un pedido de captura». Se trata de Adrián Germán Cruz. Mientras tanto, ambos detenidos e imputados están incomunicados. Luego, serán trasladados a Buenos Aires, circunstancia que será ordenada por el Juzgado Federal. Asimismo, los gendarmes secuestraron documentación de mucho valor para la causa.
Extorsión religiosa en cautiverio
A pesar de que en los procedimientos realizados el martes en esta ciudad no se rescataron víctimas, desde mayo del año pasado empezaron a surgir víctimas de la organización. Las denuncias recayeron directamente en la Justicia ordinaria de Morón, luego la causa pasó al fuero federal. Cabe recordar que Salta 4400 pudo dialogar con una de las víctimas que dio cuenta de los 40 años de sufrimiento que caracterizaron su cautiverio en este templo.
Se trata de una organización que actuaba bajo la fe en Cristo para aprovecharse de personas vulnerables, niños, niñas y gente mayor. Entre los delitos, se los acusa se dedicarse a la trata de personas, lavado de dinero, delitos contra la integridad sexual de menores y adultos, contra la identidad y contra la vida. Estos hechos coinciden con el relato de la víctima que hablo con este medio y quien fue capturada a los 14 años, durante el 78’.
Precisamente, comentó que a partir de los 14 años su vida se convirtió en un calvario. “Todo tipo de abuso, había sustracción de bebes, una chica que era violada. Ella tenía los bebés y le sacaban los bebes y se quedaban con esos bebes. Hubo gente que murió, gente que se mató porque no aguanto tanta cosa”, expuso. En este sentido, comentó que existen además dos lugares que no fueron allanados aún.
Triste final
Desde el año pasado se detuvo a varios líderes, falsos profetas, incluida La Tía Eva, detenida el año pasado en San Justo, provincia de Buenos Aires. Entre los procedimientos realizados desde el 2019 en diversas provincias argentinas, se conoció el de Bahía Blanca. Precisamente, allí funcionaba una sede de la organización donde se dio un caso espeluznante. De hecho, en la sede encontraron a un hombre de 30 años durmiendo en el piso, semidesnudo, abrazado a una biblia que no quería soltar. Determinaron que hacía 15 años que había salido a la vía pública y se negó a ser rescatado.