SALTA (Redacción) – Después de un intenso operativo policial finalmente pudieron dar con el paradero de la jefa de la banda que conducía la financiera trucha. Como fue revelado en una nota anterior por este medio, su nombre es Cynthia Elizabeth del Valle Moya. El Ministerio Público Fiscal informó que quedó detenida al medio día d este martes y fue puesta a disposición de la Justicia.
Cynthia del Valle Moya era quien conducía la financiera trucha. Esta organización criminal estafó a muchísimas personas y terminó salpicando hasta a efectivos policiales de la provincia. Se demostró que había complicidad con la empresa fantasma. Como lo verificó el Ministerio Público también hay otros miembros de la fuerza que podrían estar involucrados y formar parte del entramado delictivo.
A pesar de tener a la cabeza de la banda delictiva no se descarta la opción de que haya algún otro mando superior. Se especula que la financiera trucha además de hacer promesas ilusorias de inversiones con retorno de ganancias inmediatas, podría estar involucrada en otro delito. Una de las opciones que se maneja es que Valle Moya se encargaba del lavado de dinero y otras opciones más. La mujer detenida tenía un arduo antecedente en la escena delictiva y ya estuvo detenida.
Integrantes de la financiera trucha a disposición de la Justicia
De acuerdo a la información compartida por el personal del CIF los dos prófugos de la banda fueron detenidos. Según los datos revelados ambas personas están alojados en la Alcaidía General. Ya el viernes pasado quedaron detenidos dos efectivos policiales, que eran quienes tenían dinero en efectivo a su disposición. Hay también otras siete mujeres imputadas. De estas, seis negaron rotundamente su participación y una se abstuvo de hablar.
Vale recordar que esta investigación comenzó con el objetivo de investigar estafas piramidales de una financiera trucha. Sin embargo, a medida que avanzaba la causa se comprobó que altos mandos policiales obtuvieron grandes beneficios. Entre los estafados se encontraban efectivos de menor rango. A esto se le sumó que un policía que trabajaba investigando la causa recibió diferentes amenazas. Ahora todo queda en mano de la Justicia.