SALTA (Redacción) – En los últimos años, la Justicia en diferentes partes fue destapando ollas vinculadas a la Iglesia Católica. En Salta se han procesado, enjuiciado y encarcelado a diferentes obispos por abuso sexual. En esta ocasión, el Ministerio Público Fiscal está tras la mira del monseñor Mario Antonio Cargnello por violencia de género. Aseguran que las pruebas son contundentes.
Esta es una resolución judicial del juzgado de Violencia Familiar y Género N° 3. En la misma se dicta una medida cautelar sobre tres personas vinculadas a la Iglesia de Salta, entre ellos el obispo Cargnello. La misma fue dictada el pasado 12 de abril en donde se solicita a los imputados no ejercer más violencia de género ni de ningún tipo.
En sintesis, lo que plantea la resolución judicial es sencillo. «Intimar a los denunciados a abstenerse de ejercer actos de violencia de todo tipo«, dicta el pedido judicial. De esta manear, Cargnello tendrá que dar declaraciones sobre el tema. A su vez, se dispuso la «prohibición de acercamiento a menos de 300 metros» de las victimas.
Hay pruebas que complican a Cargnello
En este mismo sentido, se ordenó la «custodia policial fija en la puerta del domicilio de las victimas». Las mismas se ubica en el Convento San Bernardo ubicado en calle Caseros 83. Por otro lado, llamó a una audiencia contra los imputados, entre ellos Cargnello para el próximo 3 de mayo. Por lo tanto, la máxima autoridad eclesiástica tendrá que rendir cuenta frente a la Justicia.
Finalmente, fuentes judicial aseguran que hay pruebas que comprueban la denuncia realizada en su contra. Son audios y contenidos fílmicos que fueron presentados juntos a la queja judicial. Se tratarían de diversos hechos de violencia de género que sufrieron las madres y hermanas de la congregación cristiana «Carmelitas descalzas«. ¿Nueva causa que embarrará la reputación de la institución religiosa?
