SALTA (Redacción) – El Concejo Deliberante de la Municipalidad de Hipólito Yrigoyen publicó un comunicado para aclarar la situación que se había generado por las declaraciones que la concejal Laura Rojas había realizado durante la última semana. De esa manera, indicaron que la suspensión de la edil no se debió a sus dichos acerca la presunta condonación de una deuda por parte de la comuna.
En el documento, cuya autoría corresponde a la Comisión de Prensa del cuerpo legislativo, confirmaron que el municipio todavía se encuentra negociando el pago del dinero que aún debe la empresa Seabord Energías Renovables y Alimentos S.R.L. Este pronunciamiento surgió aparte de los dichos de Rojas, que había acusado públicamente a varios ediles por presuntamente dejar a la compañía exenta de este compromiso financiero.
En ese sentido, los concejales consideraron que, de esta forma, Rojas pretendió “desacreditarlos ante los vecinos y ante todos los medios”. Además, según la visión de la comisión, con estas expresiones la dirigente intentó “que se genere un malestar en la comunidad”, por lo que también cargaron contra ella por haber ejecutado una estrategia de “especulación política”.
Asimismo, el Concejo Deliberante calificó como “calumnias e injurias” a la versión que Rojas difundió “por distintos medios de comunicación”. En numerosas entrevistas, la edil no solo había ratificado que la Municipalidad había “firmado un acta condonando la deuda de la empresa”, sino que también exclamado que por medio de este acuerdo “se hipotecaba de por vida a la ciudad de Hipólito Yrigoyen”.
La suspensión
Por otra parte, los miembros del cuerpo legislativo también se ocuparon de aclarar la razón por la que se aprobó el pedido de suspensión a la edil. En primer lugar, el Concejo Deliberante confirmó que esta decisión no estuvo relacionada con las “falsas acusaciones” que realizó Rojas sobre las negociaciones entre la Comuna y la compañía Seabord.
En ese orden, precisaron que la sanción que la concejal deberá afrontar a lo largo de dos meses se debió a “faltas de respeto al vicepresidente del Concejo (Ramón Rosa del Valle) en plena sesión”. A su vez, remarcaron que esta decisión fue respaldada por más de dos tercios del cuerpo y, además, señalaron que también se le dio la oportunidad para que “se retractara” de sus palabras.
Por último, la Comisión de Prensa insistió en que, junto a la necesidad de garantizar la transparencia en el funcionamiento de la entidad ante los habitantes del municipio, esta declaración estuvo orientada a desmentir la versión que había emitido Rojas, a quien finalmente acusaron por haber “distorsionado” los hechos y, en consecuencia, haber “desinformado argumentando maliciosamente”.