SALTA (Redacción) – En primer lugar, a ciencia cierta nadie sabe bien cuál es el aporte que esta haciendo la Municipalidad a la lucha contra la Pandemia del coronavirus. Este déficit tiene dos explicaciones: o el Gobierno Municipal no está haciendo nada relevante, o -si lo están haciendo- no lo comunican ni difunden de la manera adecuada como para que la ciudadanía se entere.
En política, como en todo espacio público, lo que no se comunica no existe. Esta es la impresión de muchos salteños: inacción y falta de iniciativa por parte de la Municipalidad en un momento dramático para todos.
Todo comunica
En las últimas apariciones públicas, ya sea por falta de asesoramiento o por falta de criterio personal, la intendenta Bettina Romero se mostró íntegra aunque sin usar barbijo.
El mal ejemplo no pasó desapercibido y cientos de salteños la criticaron cuando vieron sus fotos y videos en las redes sociales. Y los cuestionamientos tenían una razón, ya que desde el 13 de abril es obligatorio el uso del barbijo en Salta, tanto para los ciudadanos de a pie como también para la clase política, aunque la jefa comunal no se dé por aludida.
Además, en las dos conferencias de prensa a las que convocó, Romero se mostró rodeada de funcionarios y legisladores, en recintos pequeños, y sin respetar las distancias mínimas. Todos estos gestos comunican una contradicción enorme por parte del gobierno comunal a las recomendaciones sanitarias vigentes.
Mientras la gente hace filas de varias cuadras para respetar el distanciamiento social cada vez que tiene que paga una boleta, en la Municipalidad se muestran a los abrazos y sin barbijo.
Amateurismo técnico
Las falencias en el área de comunicación municipal quedaron aún más evidenciadas al no saber resolver una serie de inconvenientes técnicos básicos durante las transmisiones de los mensajes de la intendenta Romero.
Se trataron de dificultades y errores comprensibles en un adulto mayor, al que le cuesta familiarizarse con las nuevas tecnologías, pero inadmisibles para una gestión que llegó supuestamente “para modernizar Salta”. Podrían contratar a un adolescente youtuber para que les dé una mano.
La semana pasada, la Municipalidad difundió un parte convocando a una conferencia de prensa que se realizaría a las 11 de la mañana. Luego, los funcionarios del área la pidieron disculpas a los periodistas y pospusieron la presentación de Romero por una hora y media más, blanqueando “problemas técnicos” para establecer la comunicación.
Pero ahí no terminó la cosa, porque tampoco se realizó a la hora indicada, sino que el mensaje de la Intendencia terminó saliendo grabado, no en vivo, y después de las 3 de la tarde.
En la última conferencia que protagonizó Romero, en el día de ayer, también hubo una serie de problemitas técnicos. Para empezar, el audio fue muy deficiente y hubo pasamano de micrófonos entre los funcionarios, algo no recomendado por las autoridades sanitarias.
Además, en Facebook, la red social con mayor penetración en la provincia, la imagen de la transmisión oficial se vio cruzada durante más de tres minutos.
¿Nadie podía avisar que giraran el celular para que se vea de manera correcta?