SALTA (Redacción) – Lejos de cesar la interna política, los intereses personales siguen primando. A pesar de una pandemia que cada vez se acentúa más en Salta, los contagios, el colapso sanitario y la crisis económica no son el único foco de atención. Al contrario, la áspera y poco admirable política, continúa siendo motivo de disturbios. En este sentido, las turbulencias se hacen sentir tras las elecciones llevadas a cabo hace unos días dentro del Partido Justicialista.
Cabe destacar que la renovación del cargo en la conducción de la CAP, se produjo luego de la renuncia del ex presidente de la Cámara de Diputados, Manuel Santiago Godoy como titular de la misma. En este marco, se desarrolló el Congreso Provincial Extraordinario del Partido Justicialista. Finalmente, fue elegido el actual Coordinador de Enlace y Relaciones Políticas de Salta, Pablo Outes, para presidir la Comisión de Acción Política (CAP) a la par de Emiliano Estrada.
En un contexto de “unidad” como bien lo calificó Pablo Kosiner, también fueron elegidos los restantes 17 miembros, cuya nómina incluye a: Emiliano Estrada, Soledad Troyano, Antonio Hucena, Esteban Amat, Angelina Canchi, Yolanda Vega, José Issa, Socorro Villamayor, Jorge Soto, Evita Isa, Dante Rosas, Daiana Ovalle, Luis Mendaña, Fabiana Correa, Juan Aguirre, Emilse Contino y Marcos Vera.
Además, Pamela Calletti y Gastón Galindez fueron elegidos como apoderados del PJ Salta.
El PJ: un maqueta para pagar sueldos
Sin embargo, los resultados hicieron brotar los desencuentros, el egoísmo y los restos del partido que hoy en buena parte no ve con buenos ojos estos resultados. Según fuentes oficiales de Salta 4400, molesta mucho que no sea Gustavo Sáenz quien conduzca el partido. De hecho, entienden que ninguno de los elegidos es quien luego “pone la cara”.
Asimismo, manifestaron su repudio hacia Marcos Vera o Emiliano Estrada, ya que sólo los ven como una estrategia para quitarle candidatos al Oso Leavy. “¿A quiénes representan?”, dispararon. En esta línea, entienden que se arma un partido sacándoles a otros sus candidatos. Desde el PJ consideran que los principales responsables son Antonio Hucena, a quien identifican como el “vicegobernador”, y Dante Rosas, ambos “atrás de la lapicera de Outes”.
Con un nivel de sueldos de $150.000 como empleado, el partido justicialista da cuenta de fisuras que desde hace un buen rato vienen a encontrarse con lo que dicta la tradición. Precisamente, esta fuente considera que el que ocupaba el cargo era el que luego terminaba por ser candidato a gobernador o el que resultaba ganador. En esta línea, recordó que fue Urtubey quien rompió esta costumbre en su relación con Miguel Issa. “Eso dio lugar a algo antinatural. Hoy el PJ es un mero sello de goma, tiene de todo un poco”, disparó.
Lejos de acabar allí. La interna da cuenta de que el partido se convirtió indefectiblemente en una “maqueta para pagar los sueldos”. Por todo esto, que consideran un “despropósito”, indicaron que necesitan elecciones y votar. De hecho, advirtieron que ni siquiera cuenta con una sede. “No hay ni sede, para comprar la sede la canalizaron con una fundación de romero y esa fundación se quedo con la titularidad del inmueble”, arremetió.
Elecciones que hacen ruido
Quienes hace rato caminan por estos lares, entienden que Pablo hace un papel que no le corresponde. “Le corresponde al gobernador, él es el que ejerce el poder del peronismo”, subrayó. A pesar de ello, comprender que a Gustavo no le convendría ser el conductor del PJ “porque electoralmente tiene otra corriente dentro del electorado que lo persigue”.
“Le conviene por un alineamiento con Nación pero hay que ver cómo responde su electorado”. Desde el Pj, señalan hoy que conductor natural del PJ es Gustavo Sáenz y solo por elecciones de los afiliados debe responderse eso. “El PJ genera anticuerpos para curarse de los que lo controlan de turno”, aseveraron.
En los pasillos se rumorea que …
Consultado al respecto de la candidatura de Estrada y Caletti como diputados nacionales, afirmaron que esto es muy posible. Tradicionalmente, la lógica manda que aquel que conduce en Nación necesitará diputados y senadores en el Congreso. La misma dinámica rige para la Provincia. De allí, que las probabilidades de que esto sea cierto se haga realidad.
En relación a la ausencia del “Oso Leavy”, el presidente del partido de la victoria es considerado como parte de una oposición poco inteligente, más bien “poco seria”. Desde el Pj, entienden que hay una falta de conducción del partido del Oso. “De repente el Frente de todos es el frente de pocos”, sentenciaron. De esta manera, la interna política expone una vez más la falta de militancia y dirigencia por figuras que finalmente, representen a los afiliados tanto como al pedido de la comunidad.