SALTA (Redacción) – La candidata a diputada nacional por Juntos por el Cambio +, Inés Liendo, relanzó su campaña electoral de cara a los comicios de noviembre para intentar llegar al Congreso. En este marco, la representante del PRO aseguró: «Llegó la hora de madurar como sociedad y de dejar de creer en las soluciones mágicas». Ademas, prometió que va a «trabajar todos los días para construir el país que soñaron nuestros abuelos».
«En estas elecciones tenemos que votar a favor de que Salta vuelva a ser una provincia productiva, una provincia que integre y que tenga progreso», apuntó Inés Liendo. De esta manera, desde sus redes sociales, la abogada completó: «Para que nuestros chicos no se quieran ir, para que la gente quiera venir a vivir Salta, a conocer Salta». En el video que difundió se la ve en el Cristo de La Caldera y señaló que es «un símbolo del abandono».
«La hora de crecer, de madurar como sociedad»
Por otra parte, la candidata mostró otra actividad de campaña y aseguró: «Cuanto más recorro nuestra provincia, más personas buenas, honestas y trabajadoras encuentro». «Es realmente inaceptable que los argentinos llevemos tantas décadas de desastre económico, educativo y social, y que no hayamos sido capaces de diseñar políticas públicas adecuadas que nos permitan mejorarle la calidad de vida a nuestra gente», describió Inés Liendo.
En ese sentido, en tono de campaña la dirigente del PRO prometió: «Yo voy a trabajar todos los días para construir el país que soñaron nuestros abuelos». Allí enumeró: «Un país libre, dónde la educación de calidad sea la prioridad número uno, dónde se respete la vida, la propiedad privada, el trabajo y se premie el esfuerzo». En este otro spot de campaña la candidata del PRO de Salta se mostró comprando frutas y verduras en el Mercado San Martín.
«No tolero seguir viendo a nuestro país de rodillas», expresó en la publicación. Y por último realizó un insólito planteó a los votantes salteños: » Llegó la hora de cambiar, de crecer, de madurar como sociedad y de dejar de creer en las soluciones mágicas que nos venden los demagogos». «Somos un país repleto de gente maravillosa, y no hay ningún motivo para que no seamos el país mejor país del mundo», cerró tras la polémica frase.