SALTA (Redacción) – La salida de Frida Fonseca del gabinete de la Municipalidad de Salta desató una polémica inesperada. Es que se desconocían los fuertes conflictos internos que aquejaban a los dirigentes que forman parte de la gestión de Bettina Romero. Es por eso que la jefa comunal intentó dejar de lado la polémica y restarle importancia a las disputas internas.
La intendenta de la Ciudad de Salta hizo fuerte énfasis en la salida de Frida Fonseca. Es que la exsecretaria de gobierno sostuvo que su salida se daba por las diferencias con dos miembros del gabinete. “No me gusta cuando las discusiones se vuelven personales, que si me cae bien uno, me cae mal el otro, me llevó mejor con vos», manifestó.
«Lo que busco es un equipo que pueda trabajar unido y respetando a los salteños, que son nuestros jefes. Son a quiénes les tenemos que rendir cuentas”, sostuvo Bettina Romero que intentó dejar de lado la polémica que dominó la agenda del municipio durante toda la semana pasada.
La jefa comunal aseguró que nadie es imprescindible dentro de la Municipalidad de Salta y dejó un fuerte mensaje para la interna. «Los funcionarios pueden estar o no. Acá hay un gobierno que sabe hacia dónde va, conocemos todo lo que hace falta en Salta, lo que hay que hacer, lo estamos haciendo. Estamos transformando la ciudad en una ciudad ordenada y por eso podemos salir a buscar créditos”, remarcó.
Por último, se refirió cobro indebido de impuestos en las boletas de luz y dejó en claro su posición. “No hubo nada irregular, nosotros lo que estamos haciendo es buscar una Salta más justa, es injusto que galerías comerciales, edificios no paguen los impuestos y que muchos contribuyentes jóvenes estén pagando sus impuestos, necesitamos mayor solidaridad”, concluyó la intendenta Bettina Romero.
