SALTA (Redacción) – La Apertura de Sesiones Legislativas en la provincia se dio con lo que será el último discurso de Gustavo Sáenz como gobernador en caso de que no sea reelecto. En su alocución, el mandatario defendió su gestión, apuntó contra los diputados nacional que -según su parecer- no acompañan leyes beneficiosas para Salta y se desligó de Nación.
El gobernador, que hasta tiene una diputada nacional dentro del bloque del Frente de Todos en el Congreso de la Nación, se desligó del gobierno de Alberto Fernández. “Vengo a hablarle a los salteños con el corazón y con la verdad, compartiendo los logros alcanzados y los desafíos que alcanzamos en este contexto. No soy delegado de ningún gobierno nacional. Primero está la patria y mi patria chica son los salteños”, expresó el mandatario.
Las palabras de Gustavo Sáenz también fueron dirigidas a los diputados nacionales que no le responden. “Espero que los legisladores nacionales entiendan que primero está su patria chica, que su partido político, y defiendan los intereses de todos y cada uno de los salteños que venimos esperando por años que levanten la mano para defender las necesidades de ellos”, señaló con euforia.
A pesar de estos dichos, Gustavo Sáenz aseguró que en la provincia no existen divisiones políticas. “No sabemos de divisiones ni grietas. Encaramos los problemas viejos y nuevos, y no buscamos culpables. Nuestra provincia aún sufre postergaciones históricas. El país creció de manera asimétrica y el norte le tocó la peor parte”, aseguró.
“He definido mi gestión con obras concretas para una Salta de igualdades y de desarrollo. Hubo que tomar decisiones difíciles. No hay recetas mágicas ni soluciones inmediatas… pero planificamos el futuro de forma ordenada, gestionamos y ejecutamos. El 2022 fue un año muy difícil, que logramos superar juntos», concluyó Gustavo Sáenz.
