SALTA (Redacción) – A tres días de que todos los argentinos tengamos que ir a las urnas se siguen expresando malestar y descontento por ciertos armados políticos. Juntos por el Cambio viene teniendo un año realmente complejo en lo que respecta a sus cuestiones internas. Agustina Álvarez encendió una vez más la llama y las diferencias propias del PRO.
Así como a nivel nacional hay una fuerte disputa entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta en Salta esto se replica. Por un lado, tenemos a Inés Liendo que va acompañada de Alberto Castillo y, por el otro, Miguel Nanni que lo hace con Eugenia de Vita. Para Álvarez esta sumatoria de funcionarios de Sáenz no es nada positivo para el PRO como fuerza política.
Por ello es que la concejala de Salta reelecta el pasado 14 de mayo mostró su malestar por sumar al equipo de la intendenta. «Una persona que coincide con el modelo de gobierno municipal que tuvimos es una persona que a mi criterio no tiene claras las ideas de Juntos por el Cambio y no tiene claras las necesidades de los salteños», expresó Álvarez sobre la alianza con Bettina Romero.
Ya el armado electoral provincial fue polémico en Juntos por el Cambio. Esa lógica se repitió en lo que compete la composición para Diputados Nacionales. El cuestionamiento que hace Álvarez es el mismo que el que se hizo con Matías Posadas. Pero ahora el foco de la polémica se asienta sobre la figura de Alberto Castillo, funcionario directo de Gustavo Sáenz.
Álvarez tampoco perdonó a la segunda de Nanni
Al mismo tiempo, Álvarez tampoco perdonó que Miguel Nanni incluyera a otra funcionaria de Sáenz en su fila. En este caso se trata de María Eugenia de Vita quien asegura tener una ficha de afiliación del PRO hace tres años. Sin embargo, la concejala desmintió esta postura. Más allá de esto confirmó que cuentan con los fiscales necesarios para este domingo.
