SALTA (Redacción) – La relación del gobernador Gustavo Sáenz con los senadores nacionales por Salta es ambivalente. En especial si se mira lo que ocurre con el peronismo quienes están en constante disputa con él. Distinto es lo que ocurre en el caso de Juan Carlos Romero, cada vez más alejados de las ideas justicialistas y en proximidad con el liberalismo. Hubo una reunión entre ellos.
Los dos políticos salteños coincidieron en la necesidad de avanzar en obras públicas fundamentales y establecer una hoja de ruta sobre cosas a realizar. Contundente definición de Romero sobre la reunión con Sáenz: «ha sido un encuentro ameno y productivo para definir objetivos comunes, más allá de las diferentes responsabilidades. Coincidimos en la importancia que tienen, para los salteños, algunas obras públicas que requieren de una gran inversión y de la ineludible participación del Gobierno Nacional».
Uno de los temas claves fue lo referido al nuevo puente de Vaqueros, la autopista entre Metán y Rosario de la Frontera, la ruta nacional 51, la ruta 40 en los Valles, la pronta habilitación del puente de ingreso y egreso de Hipólito Yrigoyen. Romero reconoció que «son prioridades que nos deberían unir a todos los salteños». Por eso mismo, expresó su apoyo y acompañamiento a la gestión de Sáenz.
Colaboración mutua
Además de esto, se ratificó el compromiso de colaborar mutuamente en todo lo que esté al alcance para «que las obras se concreten sin dilación». Ambas partes reconocieron el compromiso que asumió Nación para avanzar en obras para la provincia. Todo esto teniendo en cuenta la situación fiscal y económica por la que atraviesa el país.
No sólo eso sino que otro tema abordado fue la necesidad de buscar alternativas de financiamiento para determinadas obras y trabajos. La misma abarca desde la opción de acuerdos público-privado, particularmente teniendo en cuenta la decisión del gobierno de reducir a mínimo el gasto público. Romero y Sáenz admitieron la vulnerabilidad de las provincias del interior y el impacto del ajuste fiscal.
Por último, teniendo en cuenta que uno de los problemas más graves que tenemos en el país hoy es la falta de diálogo, este tipo de encuentros es más que valorable. Aunque la cercanía entre Sáenz y Romero es bastante lógica, el mandatario provincial no invitó ni a Sergio Leavy ni a Nora Giménez que son los otros legisladores nacionales.
