El reconocido cantante Dyango anunció que regresaría a Salta el próximo 16 de septiembre para ofrecer un concierto en el Teatro Provincial, y lo hizo con una declaración que llamó la atención: el gobernador Gustavo Sáenz le habría prometido un regalo muy especial vinculado a la cultura local.
Durante un mensaje grabado, el artista expresó su entusiasmo por volver a presentarse en la provincia y contó que Sáenz le habría dicho que le regalaría un poncho de vicuña, una prenda tradicional del NOA, considerada de gran valor simbólico y cultural. “Me prometió un poncho de vicuña”, dijo Dyango, sonriendo frente a cámara, en un gesto que pareció combinar afecto, respeto y complicidad.
Aunque el mandatario provincial no confirmó públicamente el presente, el comentario del cantante bastó para que el gesto comenzara a circular como parte de una narrativa emocional. El poncho de vicuña, históricamente reservado para visitas ilustres o figuras de alta jerarquía, podría representar una señal del vínculo personal entre Sáenz y el artista.
La elección del Teatro Provincial como sede del evento también aportaría a la carga simbólica. Se trataría de una apuesta del oficialismo local para reforzar su identidad cultural a través de gestos vinculados con la música, el arte y las tradiciones del norte argentino.
En un contexto donde la política busca nuevas formas de conexión, este tipo de gestos podría tener efectos concretos en la percepción pública. El regalo, si finalmente se concretara, no solo funcionaría como presente diplomático, sino como un mensaje: el valor de lo propio, elevado a través del reconocimiento a figuras populares.
