La Universidad Nacional de Salta (UNSa) advirtió que en 2026 perderá cerca de $14.000 millones en su presupuesto anual, una cifra que encendió alarmas en la comunidad académica. El dato surgió de los cálculos que manejan las autoridades, preocupadas por el impacto en el funcionamiento de la institución.
Desde el rectorado señalaron que la reducción de fondos afectará áreas clave como becas, mantenimiento edilicio y programas de investigación. También advierten que la merma compromete el pago de servicios básicos, lo que pondría en riesgo el desarrollo normal del ciclo lectivo.
La preocupación se trasladó al claustro docente y estudiantil. Profesores remarcaron que la universidad ya enfrenta limitaciones de recursos y que este recorte podría agravar la situación. Estudiantes, en tanto, alertan que la caída en becas y ayuda social afectará la permanencia de muchos jóvenes en las carreras.
La UNSa forma parte de un conjunto de universidades del NOA que exigen al Gobierno nacional revisar los montos previstos para 2026. Sostienen que la asignación actual no contempla la inflación acumulada ni los costos de servicios que se dispararon en los últimos meses.
En el Congreso, algunos legisladores se hicieron eco del reclamo y prometieron llevar la discusión al debate del presupuesto. En paralelo, organizaciones universitarias nacionales recordaron que la educación pública es un derecho y que la reducción de fondos contradice ese principio.
Analistas educativos destacan que este tipo de recortes impacta no solo en el nivel académico sino también en la economía regional. Miles de estudiantes dependen de la universidad para formarse y sostener actividades vinculadas a ciencia y tecnología.
El escenario abre un nuevo capítulo en la pulseada entre el Gobierno central y las universidades públicas. La comunidad académica salteña anticipa medidas de visibilización y no descarta movilizaciones para exigir una respuesta. Documentos oficiales del Ministerio de Educación confirman que la distribución de recursos aún está en discusión, lo que mantiene la incertidumbre en todo el sector.