SALTA (Redacción) – Después de varias semanas de preocupación acerca de un problemática muy sensible, el Ministerio de Salud Pública de Salta confirmó que no existen posibilidades de contagio del arenavirus en la Provincia, ya que el roedor que transmite esta enfermedad no habita en el territorio salteño. De esta manera, la cartera puso fin a las especulaciones acerca de la probabilidad de un brote de la Fiebre Hemorrágica Boliviana (FHB) entre las personas que mascan hojas de coca.
Esta novedad fue comunicada esta mañana por la responsable de la Dirección de Coordinación Epidemiológica de la Provincia, Griselda Rangeón, quien calificó como “nulas” las posibilidades de que los salteños que desarrollan la mencionada actividad puedan contraer este virus. Al mismo tiempo, la funcionaria aseguró que, por medio de las pruebas que recientemente ha realizado el Ministerio de Salud Pública, no se han encontrado personas que hayan adquirido esta dolencia.
En este marco, Rangeón ratificó que el riesgo de contagiarse arenavirus dentro de los límites de Salta “es bajo” y, en esa línea, le aconsejó a los habitantes del distrito mantengan “la tranquilidad” acerca de esta cuestión sanitaria. Igualmente, admitió que los recientes hallazgos de la cartera no implican que el sistema de salud no se encuentre constantemente alerta ante la posibilidad de algún caso que provenga de otras zonas, las cuales pueden presentar las condiciones adecuadas para la reproducción de los roedores que trasmiten la enfermedad.
Por ese motivo, la especialista expuso que actualmente “se encuentra en el algoritmo provincial de vigilancia del síndrome febril agudo, para diagnóstico diferencial ante sospecha clínica, disponible en todos los servicios de salud de la Provincia”. En tanto, garantizó que el coqueo tampoco implica un peligro para los salteños. “No se ha demostrado transmisión del virus por vía oral, lo que, sumado a la labilidad en el ambiente y su sensibilidad a la luz solar, hace que sea muy poco probable el riesgo en las personas que coquean”, expuso.
La importancia de la prevención
En otro orden, Rangeón explicó que la Fiebre Hemorrágica Boliviana es una enfermedad viral, que se deriva del virus Machupo, el cual forma parte del género arenavirus. En cuanto a la manera de trasmisión, la funcionaria indicó que se contagia por vía inhalatoria, a causa de la interacción directa con una especie de roedor campestre, el callomys callosus. Igualmente, los seres humanos también pueden adquirir esta enfermedad a través del contacto con las heces o la orina de la popularmente denominada “laucha de campo”.
En tanto, la directora comentó que la manifestación de esta dolencia se produce recién después de catorce días de incubación del virus. En ese momento, el paciente comienza a experimentar un síndrome febril agudo, en el que presenta una temperatura corporal que oscila entre los 39 y los 41 grados. Además, la persona padecerá dolores de cabeza, musculares y de articulaciones y, posteriormente, hemorragias en la piel del tronco, hematomas y sangrado de nariz.
En caso de que estos síntomas no reciban la atención médica necesaria, Rangeón advirtió que los órganos del paciente pueden comenzar a fallar y, en consecuencia, se puede producir la muerte. Por este motivo, reclamó que ante síntomas similares, las familias trasladen al enfermo hacia el centro de salud más cercano para que reciba el diagnóstico y el tratamiento correspondientes de este tipo de cuadros. Por último, la especialista enfatizó en que estas personas no deben automedicarse.
Fuente: Ministerio de Salud Pública de la Provincia de Salta