Armella solía mostrarse públicamente como un dirigente social, incluso llevó adelante varias manifestaciones y se puso al frente de protestas sociales, como así también otras protestas contra la policía, por ejemplo. En una de sus últimas apariciones, el acusado retó a un jefe policial a pelear en un ring de boxeo, a la vez que lo fustigó por la represión que el funcionario habría ordenado en contra de trabajadores de Agroindustria Tabacal.
Conocido por su vehemencia, este dirigente del barrio Caballito, de Orán, llegó incluso a presentarse como candidato a concejal. En el marco de su campaña política, este dirigente llamó a los vecinos, por los medios de comunicación, a “atacar las viviendas donde se venden drogas. Será el pueblo quien tome justicia por sus propias manos” sostenía.
Con el tiempo, sin embargo, los mismos vecinos terminarían por poner las cosas en su lugar. Con un llamado anónimo, el año pasado acusaron a Armella de llevar adelante venta de drogas, en especial en inmediaciones de centros de salud y hospital. Con esta denuncia, efectivos de la División de Drogas llevaron adelante una investigación que derivó posteriormente en la detención del dirigente.
La captura de Armella, como así también la de su hijo, se produjo en abril del años pasado, cuando la policía realizó un allanamiento en su domicilio, ubicado en barrio Caballito, donde les secuestraron dinero en efectivo, sustancias estupefacientes; un arma de fuego; 15 celulares, una tablet, una cámara fotográfica, entre otros elementos.
La condena
Imputado por la venta de drogas, Armella Cardozo, llegó a juicio en los últimos días en la Sala II del Tribunal de Juicio, en Orán, bajo la presidencia del juez, Héctor Fabián Fayos, quien, al término del debate, resolvió condenar al dirigente social a la pena de siete años y seis meses de prisión efectiva y pago de la multa, por ser coautor material y responsable del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.
Dicha pena fue agravada por ser cometido en perjuicio de menores de edad, y por cometerse en inmediaciones de centros asistenciales y lugares donde se acude para realizar actividades educativas, deportivas o sociales, en concurso real con tenencia ilegitima de arma de fuego de uso civil. Su hijo, en tanto, Juan José Armella, de 19 años, alias “Jeber”, también fue condenado por ser coautor material y responsable del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.
A diferencia de su padre, le impusieron la condena de seis años de prisión efectiva y pago de la multa. Asimismo, el magistrado dispuso su absolución del delito de tenencia simple de estupefacientes por el que también había sido acusado, para lo cual el juez Fayos, hizo aplicación del beneficio de la duda, “in dubio pro reo”. Los acusados seguirán detenidos y alojados en la Unidad Carcelaria 3 de Orán hasta cumplir su condena.