SALTA (Redacción) – Este es el último fin de semana largo del año, días que utilizan muchos para darse una escapada y conocer algunos destinos. En ese marco, el presidente de la Cámara de Turismo de Salta, Carlos Eckhardt, realizó un balance positivo del sector con lo que respecta a este 2019, pese a la crisis que se vive en el país. De esta manera detalló que en el mes de octubre se registró un alza del 8% en comparación anual e interanual.
Eckhardt celebró que Salta permanentemente es una de los destinos más elegidos tanto por argentinos como por extranjeros. A este fin de semana largo lo definió como muy positivo en tanto que la ocupación hotelera alcanzó el 80% aproximadamente. Un porcentaje alto personas que llegaron a la ciudad, y que favorecen a la activación del comercio. Cada turista que llega y consume, come o compra cualquier producto genera el movimiento de capitales.
Asimismo, indicó que se trata de un sector que no dramatiza las coyunturas de los alrededores, sino que con el trabajo mancomunado tratan de tener estabilidad y concentrarse en los aspectos que puedan ir resolviendo los problemas de fondo. También manifestó en FM 91.1 que estiman, desean y creen que en la nueva gestión provincial se seguirá consolidando el turismo y auguró que “el nuevo gobernador, Gustavo Sáenz, tomará las decisiones correctas”.
Por otro lado, el presidente de la Cámara de Turismo de Salta remarcó como punto prioritario para trabajar en la provincia a la infraestructura. Lo que hace que muchos lugares permanezcan aislados a pesar de tener un gran potencial turístico. Un ejemplo de eso es el Parque Nacional Baritú, hay que proyectar obras para que los turistas puedan apreciar el arte y sus particularidades “in situ”.
Finalmente, Carlos Eckhardt reconoció que hace falta la profesionalización del sector, haciendo un poco de autocrítica. Para ello se puede mencionar a los guías bilingües. Mientras se busca sumar la atracción de visitantes extranjeros, además se busca crear condiciones para que el empresariado pueda invertir y el Estado genere un contexto para que realmente se siga adelante con el nivel de inversión.
