SALTA (Redacción) – En el día de hoy, los salteños no enteramos de la noticia del fallecimiento de Clotilde de Ragone. Se trata de la viuda del exgobernador Miguel Ragone, quien estaba en terapia intensiva en la Clínica Cruz Azul de Salta. Tenía 98 años y se mantuvo firme durante décadas en la lucha con la esperanza de encontrar el cuerpo de su marido, secuestrado en marzo de 1976, en plena dictadura militar en el país.
Esta mañana, la noticia fue confirmada por sus familiares a través de las redes sociales. Allí, recibieron cientos de mensajes de dolor y acompañamiento por la pérdida. Había sufrido un ACV hace más de tres años y su estado era delicado. Precisamente su nieto, Fernando Pequeño Ragone le dedicó un mensaje muy emotivo en su cuenta de Facebook junto al video de la canción “La mamá” de Charles Aznavour.
“Adiós a la mamá. Adiós abuela Clotilde. No fue como lo cuenta Charles a mediados del siglo en su canción. Había ahí una casa colmada de familia y gente, hasta de niños, que aprendían de la muerte, la solidaridad y los valores para la vida. Te fuiste como todos hoy, sola, en la terapia de la Cruz Azul. E inconsciente. Qué bueno eso. No hubo dolor. Mi último día con vos, la cena de Navidad, será la foto final siempre. Ante tu ausencia eterna, todo se vuelve mágico. Y tus manos se vuelven pájaros en el aire. Como decía Mercedes Sosa, que ya tampoco está. Hasta siempre”, escribió.
Clotilde de Ragone, desde su perfil bajo, mantuvo vivo a lo largo de muchísimos años el reclamo de justicia por la desaparición del exgobernador salteño. Ragone fue secuestrado el 11 de marzo de 1976 a la vuelta de su casa, en la calle Del Milagro al 100. Hace poco, la Justicia Federal condenó a efectivos del Ejército y la Policía de Salta por el secuestro del médico y dirigente peronista, pero nunca logró determinar a dónde fue arrojado su cuerpo.
Con esta pelea como bandera, la familia Ragone siempre acompañó a la lucha de los casos por lesa humanidad. Asimismo, ellos recibieron el apoyo de otras organizaciones que fomentan la lucha por los derechos humanos. Sin una justicia total, lograron la condena de quienes intervinieron en la desaparición de Ragone, al que su viuda anhelaba dar una sepultura cristiana y no pudo.