SOCIEDAD

En busca de soluciones para el COVID-19: ¿Qué dijo la OMS sobre la inmunidad en rebaño?

La organización Mundial de la Salud habló sobre esta nueva estrategia contra el COVID-19.

SALTA (Redacción) – El aumento de casos en todo el país llevó a que los especialistas busquen nuevas estrategias para frenar el avance del COVID-19. De esa forma surgieron medicamentos, tratamientos alternativos y nuevas ideas para prevenir la saturación del sistema sanitario. Una de las estrategias que más fuerte sonó durante lo últimos días, es la «inmunidad en rebaño«, planteada por un doctor salteño.

Esta idea comenzó a hacerse eco por una gran cantidad de especialistas, quienes creen que podría servir para evitar más casos y más muertes. Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud descartó esto a través del último comunicado que publicaron. Según explicaron, está mal planteado, ya que la inmunidad en rebaño se da a través de la vacunación y no exponiendo a la sociedad al virus.

Asimismo, declaró que la propagación libre del COVID-19 «no es una opción». El directivo de la OMS aclaró que la inmunidad en rebaño es un concepto utilizado para la vacunación, en el que la protección radica en protegerse de un virus alcanzando el umbral de vacunación. Además, señaló que esta estrategia es científica y éticamente problemática.

Una nueva estrategia

Tal como publicó Salta 4400, Luis Cataldi, médico salteño, se mostró a favor de esta estrategia y sostuvo que con esto se evitaría la saturación del sistema sanitario. Propuso que la sociedad se tenía que contagiar de forma sistemática, organizada y escalonada para así ir obteniendo la inmunidad. No obstante, no sería para todos, sino que solo contemplaría a aquellas personas que no se encuentran dentro del grupo de riesgo.

El «negocio» de la vacuna

El Dr. Cataldi adelantó que la inmunidad en rebaño no iba a ser aprobada por la OMS ni por los demás organismos internacionales. Esto se debe a que quieren hacer de la vacuna «un negocio» y esta estrategia permitiría que el bienestar social no depende de ese medicamento. Así pasó, mostrando a una Organización Mundial de la Salud totalmente en contra, al igual que muchas farmacéuticas y referentes internacionales.

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