SALTA (Redacción) – Otra denuncia pone en la mira al Rugby debido al mal comportamiento de sus jugadores. En esta oportunidad, un joven de 18 años, llamado Lautaro Insua, fue agredido físicamente por rugbiers del Club El Tala de Córdoba. Según la información que trascendió, todo habría comenzado porque se les negó la entrada a una fiesta en un country llamado La Candelaria.
El joven denunció este hecho y publicó sus fotos en donde se lo ve con la cara partida producto de los violentos golpes. A pesar de las pruebas y de la identificación de los rugbiers, recién están procediendo con las detenciones. De acuerdo a sus declaraciones, uno de los que participó de la golpiza es Mateo Soler, hijo de Facundo Soler, exjugador de Los Pumas y de El Tala.
«Un grupo de personas entró sin permiso y cuando se le pidió que se fueran me empezaron a golpear en la cara y el piso», contó la víctima sobre el hecho ocurrido en Córdoba por medios nacionales. La madre de Lautaro comparó este hecho con lo sucedido a principio de año con Fernando Baez Sosa y sostuvo que no terminó de la misma manera porque su hijo no estaba solo, pero estuvo muy cerca de que tenga el mismo final.
«Lautaro está vivo porque Dios es grande y porque sus amigos lo ayudaron, si hubiera estado solo habría sido como el chiquito de Gesell», declaró la madre. Por su parte, el agredido señaló que esto no se trató de un hecho aislado, ya que no es la primera vez que pasa algo así. «Estos chicos eran muy grandotes. Cada golpe que me dieron resultó en una fractura», contó. Los golpes propiciados le quebraron el tabique y le afectaron la zona ocular.
Defensa de los acusados y comunicado del club
El expuma salió a aclarar el hecho que tuvo como protagonista a su hijo y sostuvo que no se trató de un ataque en manada. Según declaró, Lautaro habría comenzado la pelea por estar alcoholizado y su hijo solo se defendió. Por su parte, el club emitió un comunicado en donde «repudia y condena enérgicamente este hecho». También informaron que ya se comenzó con el «proceso administrativo interno correspondiente» para establecer las sanciones correspondientes para los rugbiers.