SALTA (Redacción) – Un nutrido grupo de personas se manifestó en la puerta de la Dirección de Transporte de Tartagal, ubicada dentro de la Terminal de Ómnibus local. Sin embargo, el reclamo escaló notoriamente cuando tres empleadas municipales se encadenaron en la oficina solicitando a la comuna que mejoren sus condiciones laborales.
Las trabajadores pertenecen al sector de planilleros. Por este motivo, se desempeñan en la oficina de Prevención y Educación Vial de la Municipalidad. La razón de su protesta se dio como consecuencia del pase a Contratos del que no formaron parte. Es que la nómina reúne a 100 personas por parte de gremios y 30 propuestos por la comuna, y estas empleadas junto a algunos de sus compañeros no reúnen las condiciones necesarias para ello.
Es que según afirmaron los manifestantes, el grupo suma más de 10 años de antigüedad en la órbita comunal de Tartagal, aunque se desempeñaron en diferentes áreas. Tras exigir reunirse con el intendente Mario Mimessi, quien terminó arribando al sitio fue el presidente del Concejo Deliberante del municipio, Sergio González.
Los reclamos de las encadenadas
Las empleadas municipales que se manifestaron de esta particular manera, aseguraron que no obtuvieron respuestas del municipio y tampoco del gremio. “Cumplimos con nuestro trabajo y cuando le dijimos a Fermín Hoyos (secretario de ATE) él solo dijo que la decisión también pasa por la municipalidad”, sentenció una de las manifestantes.
«Nos dijeron que el reclamo debimos haberlo hecho a la gestión anterior, eso no es lo que importa porque los que están ahora son ellos», agregó otra de las manifestantes. «En la lista de los que pasarán a Contratados hay 100 por el gremio y 30 por el municipio. Nosotras no estamos. Tenemos 12 a 15 años de antigüedad y nunca hicimos problema, pero ya no podemos seguir así”, otra de las municipales de Tartagal que protagonizó ese encendido reclamo.