SOCIEDAD

Docentes exigen la suspensión de las clases presenciales por 15 días

Diferentes sectores educativos solicitarán el cierre de las escuelas a partir del 17 de mayo.

SALTA (Redacción) – La situación epidemiológica en la provincia mostró complicaciones durante las últimas semanas y las escuelas no quedaron exentas de esto. Docentes reclaman que dentro de las instituciones también crecen los contagios y no hay dinero para comprar insumos de sanitizacion. Por este motivo, solicitan al Gobierno la suspensión de las clases presenciales por 15 días.

Diferentes sectores educativos se organizaron para pedir a las autoridades que suspendan las clases presenciales en toda la provincia. Para ello, presentarán un petitorio ante el Ministerio de Educación, en el cual exigirán el regreso a la virtualidad por dos semanas. El pedido remarcará que los espacios educativos deberían cerrar sus puertas a partir del 17 de mayo, por 15 días como mínimo.

En diálogo con una radio local, Gustavo Soto, secretario general de UPCN, aclaró que solo se pide la suspensión de la presencialidad y no así el dictado de las clases. El representante del sector remarcó que los motivos del pedido son: el aumento de casos positivos entre alumnos y profesores, la falta de insumos y las lamentables condiciones de los establecimientos educativos de la provincia.

Los docentes ya presentaron una gran cantidad de reclamos sobre estos problemas y muchos de ellos se plantearon cuando las autoridades decidieron avanzar con las clases presenciales. A pesar de ello, el COE decidió continuar con la actividad dentro de los espacios educativos. Otra situación que encendió el malestar de los educadores fue la falta de vacunas para gran parte del sector.

Condiciones edilicias

De todos estos planteamientos, el que más se resalta es la lamentable condición sanitaria y edilicia de muchas escuelas de Salta. Según el secretaria de la UPCN, muchas instituciones funcionan sin tener habilitados los baños y sin contar con suministro de agua. Entonces, resaltó que la suspensión dela presencialidad les permitiría «ponerse al día con las cosas que faltan”.

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