SALTA (Redacción)- Una problemática que ha tomado relevancia a lo largo de estos últimos años es la frontera de Argentina y Bolivia. Y más aún el año pasado en medio de la pandemia. Por este paso ilegal atraviesan personas, comerciantes, hay actividad de las chalanas y de los bagayeros. Además cobró vigencia por las tragedias el tema de los gomones sobre el río Bermejo.
Al respecto de esta situación el ministro de Seguridad de la Provincia, Juan Manuel Pulleiro, adelantó detalles de un proyecto que busca mejorar la infraestructura de controles en la zona. En primer lugar, el funcionario contó que este martes tuvo una reunión con integrantes de la Comisión de Frontera de Nación.
El ministro relató que en el encuentro se conversó sobre la posibilidad de aumentar la cantidad de cámaras. El punto central es la localidad de Salvador Mazza. Se busca además integrarlas al Sistema de Emergencias 911. “La idea es formar un 911 federal con Gendarmería trabajando de manera conjunta con la Policía de Salta monitoreando los pasos fronterizos”, manifestó Pulleiro.
Además el funcionario agregó que “necesitamos un mínimo de 14 cámaras para Salvador Mazza. A esas cámaras las compraría Nación y luego se integrarán al 911 con monitoreo a cargo de Gendarmería” destacó. Así también añadió que en el caso de Aguas Blancas, “no será necesario porque tiene su propio sistema y no requiere más cámaras”.
Finalmente el titular de la cartera de seguridad aseveró que, pese a los avances tecnológicos, también es necesario el acompañamiento con recurso humano. “Nuestra frontera es muy extensa y necesita control. Nunca es suficiente poner cámaras ni radares ya que para nada reemplaza al personal patrullando”, opinó.