SALTA (Redacción) – Los empleados de los casinos de Salta siguen sin obtener respuestas por parte de las autoridades provinciales. En el marco de la nueva etapa de la cuarentena, las salas de juego son los únicos lugares que no tienen permiso para abrir sus puertas. Cansados ya de esta situación, realizaron una nueva protesta en Grand Bourg, para ver si en esta oportunidad los recibía algún funcionario municipal. Y advirtieron que en caso de no tener soluciones, realizarán un acampe.
Salta 4400 se acercó a la manifestación y pudo hablar directamente con los afectados, quienes utilizaron este medio para pedir que los escuchen. «La situación ya es bastante preocupante para todos los casinos de Salta. Ya va a ser un mes que estamos cerrados, nos venimos manifestando hace tres semanas y no tenemos solución por parte del COE ni de nadie que forme parte del Gobierno», reclamó uno de los trabajadores.
En ese sentido, recalcó que existe un notable malestar entre los empleados de las salas de juego, ya que muchas familias dependen de esta actividad. «Necesitamos una solución, necesitamos trabajar, no entendemos porque somos la única actividad que seguimos cerrados. Tenemos todos los protocolos que pidieron, todo aprobado, y seguimos con la negativa de seguir cerrados», expresó durante la entrevista.
El trabajador recalcó que si bien todos los casinos de Salta atraviesan por esta situación, los empleados de la empresa Lucky están mucho peor. «Esas personas están hace dos meses con sueldos impagos. Si la empresa no abre, no genera ingresos y si no genera ingresos, no pueden pagar los sueldos. Por eso necesitamos trabajar», aseveró.
Nuevas medidas en caso de no recibir respuestas
Ante la falta de respuestas por parte del Gobierno, los empleados de los casinos de la provincia anunciaron la realización de un acampe frente a la sede municipal. «Ya no tenemos como subsistir, al no tener sueldos, al estar la empresa cerrada no tenemos como subsistir», aseguró el entrevistado. En ese sentido, detalló que son 1.000 las familias perjudicadas por la inactividad de las salas de juego en todo el territorio salteño.