SALTA (Redacción) – El Censo esta previsto para 2020 y ya había sido preparado previamente por la anterior gestión del INDEC. Sin embargo, la llegada de la nueva administración y de la pandemia provocaron el retraso de dos años en el mismo y la contratación de nuevas empresas para el desarrollo del mismo. Esto se tradujo en una fuerte polémica que obligó al organismo conducido por Marco Lavagna a emitir un comunicado.
Es que el INDEC reconoció groseras fallas en su sistema que no permiten conocer los resultados preliminares del censo. Originalmente, durante el mes de agosto se debían conocer -al menos- que cantidad de población ostentaba cada provincia. Sin embargo, esto se retrasó por fallas en el Censo digital que el propio gobierno había asegurado que era «un éxito».
La postura del INDEC
En el comunicado, el INDEC aseguró que parte de las planillas del Censo digital no figuran. «La evaluación realizada sobre las planillas de conteo rápido concluyó que, por motivos diversos, un porcentaje de habitantes de las viviendas que respondieron el Censo digital no fue incluido y, por lo tanto, no permite reflejar íntegramente los totales preliminares de la población existente en cada una de las jurisdicciones del territorio nacional», informaron.
De esta manera, el foco pasó a estar puestos en las empresas que procesaron los datos del Censo. Es que ambas no tenían experiencia en el rubro. Ofertaron por cifras menores a sus competidoras, y tienen estrechos lazos con funcionarios del Gobierno Nacional, algo que genera aún más polémica.
Lo cierto es que se desconoce cuándo y cómo se conocerán los datos del Censo. Sin embargo, lo que más preocupa a las autoridades tiene que ver con la credibilidad de los datos obtenidos por el mismo. Es que la falta de datos certeros a meses de la realización del censo pone el foco en los datos mensuales entregados por el INDEC y su veracidad.