SALTA (Redacción) – Probablemente Gustavo Sáenz esperaba una mayor aprobación a su propuesta de construir un alambrado fronterizo con Bolivia. Sin embargo, las críticas y los reproches cada vez se acumulan más. Ahora se sumó la Conferencia Episcopal vinculada al Monseñor Mario Antonio Cargnello.
En un comunicado oficial dieron a conocer la postura de la Iglesia de Salta. Particularmente solicitaron al Gobierno provincial no caer en un acto de criminalización. Vale destacar que antes de la llegada de Javier Milei, el gobernador Sáenz jamás había pensado este tipo de medidas disruptivas. Primero aranceló la salud pública y ahora la idea del alambrado.
El mensaje de los capellanes de Salta es claro y advierten sobre el peligro de replicar estrategias fóraneas. «El endurecimiento de las fronteras argentinas replica estrategias de Trump y contraviene el mensaje de fraternidad promovido por el Papa Francisco», advierten. De este modo, expresan su preocupación por este panorama que se está viviendo en el país.
Replicando la retórica del Papa Francisco convocan a los gobernantes a no criminalizar a los extranjeros y recibirlos «con dignidad y respeto”. Claramente es un mensaje que ataca directamente al gobernador Sáenz y a su comportamiento oportunista del último tiempo. Desde la Iglesia salteña advierten sobre posible incremento del «racismo o la xenofobia».
Rechazo a los discurso de época
Al mismo tiempo, en el mismo comunicado repudian absolutamente las declaraciones que forman parte del clima de época. «La exclusión, la desigualdad o desprecio hacia quienes piensan y viven de manera diferente» es algo que repudian absolutamente desde el Arzobispado salteño.
