SALTA (Redacción) – El proceso de ajuste económico ha impactado prácticamente en todos los sectores económicos. Desde las estaciones de servicio informan una fuerte baja de la rentabilidad económica. Además, advierten sobre lo complicado que sería aplicar el autodespacho de combustible por costumbres arraigadas en la comunidad argentina.
Hay una fuerte caída del consumo de combustibles y un aumento de precios por debajo de la inflación. Por eso es que la Cámara de Expendedores de Estaciones de Servicio de Salta, conducida por Manuel Pérez; señalan una inmensa caída de la rentabilidad. «El combustible aumentó menos que la inflación, lo que significa que, aunque los precios subieron, el ingreso real de las estaciones de servicio disminuyó», explicó.
Por otro lado, los trabajadores de las estaciones de servicio lograron mantener su poder adquisitivo porque las paritarias acompañaron el proceso inflacionario. De todos modos, la baja de rentabilidad complica la situación del empresariado. En este contexto, pidió que se revise la metodología de análisis de costos y precios de la inflación medida en el INDEC.
Autodespacho de combustible
Por otro lado, finalizando el mes de enero el presidente Javier Milei firmó un nuevo decreto que autoriza el autodespacho de combustibles en las estaciones de servicio. Debido a la cultura de los consumidores es probable que su aplicación se demore por la falta de la tecnología adecuada y ausencia de regulaciones específicas.
«En nuestro país, el hábito de ser atendido por un playero está muy arraigado. No es fácil cambiarlo de un día para otro», indicó. A esto se suma que las estaciones de servicio dependen de las petroleras y poseen el sistema de despacho y cobro. «Hoy en Argentina no están los equipos necesarios para que los consumidores puedan cargar y pagar sin asistencia. Habría que incorporar tiqueteras, máquinas de cobro automático y otros dispositivos que aún no están en el mercado», finalizó.
