SALTA (Redacción) – Como prácticamente todos los fines de semana desde el inicio de la pandemia, se desactivaron fiestas clandestinas. Sin embargo, una de ellas llamó poderosamente la atención ya que contaba con la presencia de 15 efectivos de la Policía de Salta que fueron suspendidos de la fuerza.
José Ibarra, jefe de la Policía de Salta, aseguró que los oficiales no recibirán un tratamiento especial. “No escondemos a los policías que hacen mal su trabajo y actuamos conforme a las normativas nuestras. Cumplimos con todos los pasos procedimentales, si es causa penal, los pasos internos, si es causa administrativa, porque el mensaje fue siempre claro para el personal policial”, argumentó.
“El personal policial sabe lo que tiene que hacer y lo que no tiene que hacer. Si hace algo que no está permitido, sabe de antemano cuáles son las consecuencias de su accionar. No porque sean policías se les va a dar algún grado de permisibilidad. Estamos obligados a cumplir más que cualquier persona civil”, remarcó.
Asimismo, José Ibarra reveló que aún no está claro que sanción podrían recibir los involucrados en estos hechos. “Todavía no está determinado porque las situaciones son diferentes en cada efectivo. La medida inicial, como en cada caso en el que hay un cuestionamiento sobre la conducta del policía, es suspenderlos, apartarlos de sus funciones, mientras se sustancia la actuación administrativa”, relató.
Por último, detalló los cargos y la situación de los integrantes de la Policía de Salta involucrados. “Tenemos personal superior, oficiales, suboficiales, aspirante a agenda de segundo año, aspirante a agente de primer año. Las reglamentaciones son diferentes de acuerdo a la calidad de cada una de las personas. Tenemos personas con graduación alcohólica de 0.47, 0.97, personas con graduación alcohólica 0. Entonces, cada situación de cada uno de ellos es diferente”, concluyó José Ibarra.