SALTA (Redacción) – El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, volvió a mencionar sus planes para la construcción del muro en la frontera sur con México, que fue una de sus principales promesas de campaña electoral y ahora busca reflotar con miras a su reelección en las próximas elecciones de 2020. Remarcó la negativa del Partido Demócrata a incluir en el presupuesto de 2020 fondos para la valla fronteriza con el país latino. Sin embargo, este domingo el mandatario aseguró que la muralla tendrá unos nuevos 800 kilómetros para el próximo año.
«Estamos tomando dinero de todas partes porque como saben los demócratas no quieren el muro, han peleado contra todos los pasos que hemos intentado dar pero el Ejército ha dado un paso al frente y han hecho un trabajo fantástico», escribió el mandatario en su cuenta oficial de Twittter. Sus palabras son clara referencia a la negativa del Partido Demócrata a incluir fondos para la construcción del muro con México en el presupuesto de 2020. A pesar de esto, la Casa Blanca ha avanzado con otro tipo de estrategias como el desvío de por lo menos 155 millones de dólares que eran para la atención de desastres y emergencias para destinarlo a los temas fronterizos.
En este sentido, en un video publicado en Twitter, Trump detalló que la estructura tendrá unos 9 metros de altura. Y continuó explicando que prevé con el dinero, recientemente aprobado desde el Pentágono – unos 3.600 millones de dólares-, destinarlos a la obra y así se concluyan un total de 280 metros de Muro. Los tramos serían los ubicados en Arizona, California y Texas, este último incluyendo El Paso y la zona de Ladero. Esto permitiría, de acuerdo con los encargados de la Seguridad del Pentágono, la reducción de funcionarios desplegados en la frontera.
Además, el presidente estadounidense hizo hincapíe y mencionó los casos de detección de «pandilleros» en la frontera, que ya habrían sido detenidos y expulsados. «Los sacamos, no los queremos en nuestro país, se los hemos dicho contundentemente», agregó Trump para reavivar el discurso de expulsión de latinos que utilizó en la campaña electoral para llegar a Washington. Esto se suma incluso a las medidas controversiales contra la migración ilegal, incluyendo los cambios al Acuerdo Flores, que permitirían la detención de familias indocumentadas de manera indefinida.
No hay acuerdo de paz con talibanes
Por otra parte, el presidente norteamericano reveló que este domingo se iba a reunir, en secreto en Camp David, con líderes talibanes de Medio Oriente y, luego por separado, con el presidente de Afganistán. Sin embargo, el mandatario informó que canceló a última hora el encuentro por un incidente y suspendió las negociaciones de paz. Todo lo informó también vía Twitter, y aclaró que tomó la decisión tras conocer que un ataque reciente en Kabul mató a 12 personas, entre ellas un soldado estadounidense.
De esta manera, Trump determinó que si los talibanes no pueden aceptar un «alto al fuego» durante las conversaciones, tampoco tienen el poder de negociar un acuerdo significativo. Por su parte, el grupo extremista afirmó que Estados Unidos sufrirá más «perdidas» por la decisión del presidente de cancelar las conversaciones de paz. Mientras que la Casa Blanca prometió mantener la presión militar sobre los talibanes, en cambio de los esfuerzos para forjar un acuerdo que ponga fin a casi 20 años de guerra en Afganistán.
«Ambas partes (Estados Unidos, Talibán) estaban ocupadas preparándose para el anuncio y firmando el acuerdo de paz, pero ahora el presidente (Donald Trump) suspendió el diálogo de paz. … Esto conducirá a más pérdidas para Estados Unidos«, dijo Zabihullah Mujahid, un portavoz talibán, en un comunicado. Alrededor de 2.400 militares estadounidenses han fallecido desde el país norteamericano envió sus tropas a Afganistán para combatir contra el Talibán que amparaba a los líderes de Al Qaeda. Ahora, el retiro de los l4.000 efectivos que continúan en el país de Medio Oriente aún no parece definitivo.
