SALTA (Redacción) – El empresario sojero fue uno de los primeros en sumar su apoyo a la fuerza libertaria de Javier Milei. También celebró el Decreto de Necesidad y Urgencia presentado por el jefe de Estado reconociendo que es hora de volver a hacer dinero. Es decir, las medidas establecidas le viene muy bien a los intereses particulares de Alfredo Olmedo y argumentó que los cambios son en favor del país.
«En diez minutos el presidente cambió el rumbo del país y ahora las cosas están más claras», destacó Olmedo. Siendo uno de sus primeros socios políticos este apoyo no sorprende ni vislumbra a nadie. Hay que tener en cuenta que el parlamentario del Mercosur tiene gran influencia, además, en el contexto presidencial y las decisiones que se toma.
Repitiendo el lema que se baja desde el Gobierno, aclaró que «se terminó la fiesta. No hay plata. Hay que generar plata y no la pueden generar los pobres. No se puede estar sosteniendo con la inflación y la pobreza la viveza de algunos», argumentó Olmedo como si no hubiese parte del banquete en todo este tiempo. Eso sí, destacó que habrá más empleo y competitividad con un mercado totalmente desregulado.
La fiesta en una Ferrari
Más allá de las críticas al modelo anterior, el empresario salteño se mostró en una Ferrari circulando por las calles de Salta. En un momento de compleja sensibilidad y problemáticas sociales el sojero irrumpió con su supersport vislumbrando las pérdidas que tuvo en estos años de fiesta. La aparición de Olmedo en su vehículo no le cayó a bien al común de la gente aunque muy poco le importa lo que piensen de él.
«La situación del país era una sola, era una catástrofe. Usted no podía continuar en el camino que traía el anterior gobierno, donde curiosamente el último mes parecía que vivía en otro mundo, y repartió plata por todos lados. Bueno, esas son las consecuencias de hoy», responsabilizó Olmedo a la pesada herencia recibida del gobierno de Alberto Fernández.